Luego del discurso del Presidente Alberto Fernández en la apertura de sesiones ordinarias del Congreso de la Nación, el Senado pone en marcha su actividad parlamentaria con el debate en comisiones del proyecto de Ley que modifica el régimen jubilatorio de jueces y diplomáticos.
Tras la sanción obtenida en la Cámara de Diputados, el miércoles el oficialismo buscará sacar dictamen favorable en una reunión plenaria en las que participarán la Comisión de Trabajo y Previsión Social -presidida por el pampeano Daniel Lovera- y Presupuesto y Hacienda, cuyo titular es el cordobés Carlos Caserio.
“Hemos tomado el compromiso de que le vamos a dar la mayor celeridad posible al tratamiento”, le dijo la semana pasada Lovera a Tiempo Argentino luego de renovar como presidente de la Comisión que será cabecera en el tratamiento del proyecto.
El encuentro, que se da en medio de las tensiones con el sector judicial que amenaza en pedir al inconstitucionalidad de la reforma, será a las 17 horas en el Salón Arturo Illia del Palacio Legislativo y replicará las exposiciones del Ministro de Trabajo Claudio Morini, el titular de ANSES, Alejandro Vanoli y el secretario de Seguridad Social del Ministerio de Trabajo, Luis Guillermo Bulit Goñi.
Como invitados, estarán presentes el presidente de la Asociación de Magistrados, Marcelo Gallo Tagle, representantes de la Asociación de Fiscales y Funcionarios del Ministerio Público Fiscal y el titular de la Unión de Empleados de la Justicia de la Nación, Julio Piumato.
Se espera que el debate dure entre dos y tres horas y se prevé que habrá un dictamen en minoría por parte del espacio de Juntos por el Cambio que en el Senado tiene posturas divididas.
El proyecto de ley fue aprobado el jueves pasado, en el periodo de sesiones extraordinarias convocadas por el presidente de la Nación. En medio de un escándalo protagonizado por los diputados de JXC, quienes se retiraron del recinto tras considerar que la presencia de Daniel Scioli en su banca era “ilegal” por haber sido nombrado embajador en Brasil. La iniciativa contó con 128 votos positivos y dos abstenciones de los diputados de la Izquierda.
La letra chica del proyecto establece la edad jubilatoria en 65 años para hombres, elevándola en un plazo gradual- y mantiene en 60 años la edad de las mujeres.
Además, se eliminó el mínimo de 20 años de aportes en el Poder Judicial como condición para conseguir la jubilación y se mantienen los 10 años de servicios continuos o bien 15 años de desempeño interrumpido.
Por otro lado, modifica el artículo 17 inc. B, aclarando que para el cálculo del haber inicial se va a tomar los 120 haberes al valor que tengan en el momento de pedir la jubilación. “Hoy los jueces se jubilan con una tasa de sustitución fija determinada por la ley que es el 82% sobre el último haber”, aseguró el Ministro de Trabajo, Claudio Moroni en su exposición en Diputados.
Por último, en la votación en particular, se hizo lugar al pedido de un sector del sindicalismo judicial para incluir a jefes de despacho y prosecretarios administrativos en el régimen jubilatorio especial.