La intensa lluvia de Santa Rosa no se llevó la rosca de Casa Rosada. Esta tarde, el presidente, Javier Milei, recibió a los principales miembros de los bloques aliados para explicarles de primera mano la razón por la cual vetará la recomposición del 8% a los jubilados y el remiende de las cajas previsionales provinciales que tanto el Senado como Diputados aprobaron por mayoría.
Durante la cumbre, que inició cerca de las 19 y se extendió por una hora, el presidente les hizo saber a sus socios políticos las supuestas consecuencias macroeconómicas de este aumento. Según explicó, esta aplicación imprimiría un déficit de entre 1,2 y 1,8% a las cuentas fiscales del Ejecutivo, margen que en el gobierno no están dispuestos a aceptar.
Luego de la puesta en conocimiento de este escenario, al que uno de los presentes calificó como “muy claro y contundente”, los dialoguistas prometieron su apoyo al oficialismo. Según pudo saber Tiempo, el veto del proyecto se formalizará en las próximas horas a través del Boletín Oficial.
“Entendemos que hay un desvío que tiene que ver con el déficit fiscal. Volvieron a hacer una ley y nosotros estamos diciendo: de dónde sacamos para poner. Caímos en lo mismo en lo que había caído el populismo. Con la presencia nuestra no van a llegar a los dos tercios”, sostuvo el jefe de la bancada PRO, Cristian Ritondo, a la salida de la cumbre. De esta forma, y a diferencia de lo que se especuló durante los últimos días, la oposición no llegaría a alcanzar las bancas necesarias para insistir con el proyecto original.
En tanto, y bajo la atenta mirada de su hermana Karina quien formó parte estelar de la reunión, el líder de los libertarios se mostró agradecido por el apoyo de sus socios parlamentarios. Además auguró poder mantener el trabajo conjunto dentro del recinto, un deseo que dentro del PRO confirmaron que cumplirán. Sin embargo, y a pesar de la reciprocidad en el vínculo, desde el partido amarillo confirmaron a este medio que no avanzarán en el corto plazo con la conformación del interbloque con La Libertad Avanza.
“La convivencia es lo último, por ahora vamos a seguir saliendo”, bromeó un integrante de la mesa chica del partido fundado por Mauricio Macri. En este sentido, aunque sostienen que las agendas parlamentarias de ambas fuerzas estarán en sintonía, desde el PRO mantienen intacta su voluntad de independencia, al menos por ahora.
Para una irrefutable fuente al tanto del presente del espacio, la fusión con LLA es prácticamente ineludible. “Por más que Mauricio se empecine en mantenerse divididos, no tiene mucho más margen. Puede seguir insistiendo con algunos pedidos que considere necesarios, pero no le va a quedar otra opción que cerrar”, analizó ante este medio días atrás.
Aunque sin mayores definiciones políticas, los integrantes de la cumbre acordaron mantener la línea de diálogo abierta. La próxima vez que el gobierno vuelva a presentarse frente a los legisladores será a las 11 de la mañana de este miércoles, cuando el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, dé su primer informe de gestión ante el Congreso.
En representación del gobierno, además del propio presidente, estuvieron Francos, el vicejefe de Gabinete del Interior, Lisandro Catalán y la secretaria general de la presidencia, Karina Milei. Aunque la plana mayor del Ejecutivo se plegó a la reunión vespertina, las miradas se posaron sobre la silla vacía de Santiago Caputo, quien no participó de la cumbre por decisión propia.
Según pudo reconstruir este diario, el asesor presidencial aún mastica bronca por el revés que recibió la semana pasada, cuando el Congreso rechazó el DNU que habilitaba un presupuesto de $100 mil millones para la SIDE, organismo que maneja desde su despacho en el primer piso de la Casa Rosada.
Por La Libertad Avanza estuvieron los senadores Bartolomé Abdala, Juan Carlos Pagotto, Ivanna Arrascaeta y Ezequiel Atauche, que se sumaron a participar de la reunión a último momento y tuvieron un momento a solas con el presidente y su mesa chica para diagramar el futuro del bloque tras la escandalosa salida de Francisco Paoltroni de la bancada esta semana.
En tanto, por diputados estuvieron presentes Gabriel Bornoroni; Nadia Márquez; José Peluc; Pablo Ansaloni; Nicolás Mayoraz; José Luis Espert; Lisandro Almirón; César Treffinger; Bertie Benegas Linch; por el PRO el jefe de bloque Cristian Ritondo; Maria Eugenia Vidal; Luciano Laspina; Silvana Giudici; Diego Santilli; Alejandro Bongiovanni. También, en representación del MID estuvo Oscar Zago, ex presidente del bloque libertario.
La presencia del legislador tiene como trasfondo la voluntad del oficialismo de volver a sumar al porteño como aliado dentro del Congreso. Zago fue eyectado del bloque libertario en abril pasado, luego del contratiempo que supuso su intento por designar a Marcela Pagano como presidenta de la comisión de Juicio Político, un movimiento que desde la mesa chica del presidente leyeron como traición.
La relación con el líder del MID volvió a aceitarse en los últimos días, luego del impacto que causó la salida de Lourdes Arrieta del bloque libertario. Según él mismo contó, Milei se comunicó con su ex aliado por teléfono y en ese amigable intercambio de mensajes acordaron retomar el diálogo político, coartado desde abril. En tanto, también trascendió que el libertario le habría pedido al dirigente que no cobije a la mendocina en su bloque, una petición que, por el momento, parece cumplirse.
Esta fue la primera vez que Javier Milei se involucró personalmente en la gestión política de su gobierno. El presidente mantiene a rajatabla su reacia relación con el arte del diálogo y delega en su hermana y el asesor estrella todo el armado estratégico. Sin embargo, según pudo confirmar Tiempo, esta línea cambió en las últimas horas por pedido expreso del Triángulo de Hierro, que entiende menester que el libertario empiece a formar parte de las mesas de diálogo con la oposición dialoguista.
Este cambio de estrategia llega después del escándalo que implicaron las tres derrotas consecutivas que sufrió el gobierno en el Congreso. Por eso ahora la Rosada aparece decidida a alinear la tropa para evitar nuevos errores no forzados. Así lo acordaron en la reunión de emergencia que tuvieron ayer Karina Milei, Guillermo Francos, el presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem, el secretario de estado Eduardo “Lule” Menem y el asesor todoterreno, Santiago Caputo.
La decisión del presidente de introducirse en el juego político y cerrar filas con el PRO se da luego de las cuatro cenas que el libertario compartió con Mauricio Macri en Olivos. Allí, el expresidente le habría recomendado al libertario la necesidad de no delegar tanto sus responsabilidades y, por el contrario, meterse en el barro de los acuerdos.
El consejo del boquense disfraza su voluntad de limar las funciones extraordinarias que Caputo aumenta semana a semana en la gestión. Para Macri, la figura del apóstol de Jaime Durán Barba condensa todas las trabas para concretar el desembarco de su tropa en la gestión libertaria, un reproche que del otro lado del mostrador no desmienten.