El flamante gobierno de Gustavo Petro en Colombia presentó ante el Congreso un proyecto de ley de reforma tributaria para obtener, en una fase inicial, alrededor de 25 billones de pesos (5.763 millones de dólares) adicionales en 2023, claves para financiar su agenda social.
La reforma plantea incrementar el recaudo de impuestos hasta llegar a unos 50 billones de pesos adicionales al año (11.528 millones de dólares) de manera gradual, precisó el ministro de Hacienda, José Antonio Ocampo, durante la radicación de la iniciativa.
La reforma tributaria busca desmontar tratamientos tributarios preferenciales que benefician a los más pudientes, reducir la pobreza y la desigualdad en Colombia y erradicar el hambre, precisó el documento.
La semana pasada Ocampo dijo en una entrevista con Reuters que «es imposible» realizar el plan de gobierno del izquierdista Petro sin la aprobación de la reforma fiscal.
Las claves de la reforma
Entre las principales propuestas del gobierno de Gustavo Petro están una mayor tributación de las personas que ganan más de 10 millones de pesos (2.305 dólares) mensuales, un impuesto sobre el patrimonio de forma permanente y un tributo sobre las utilidades provenientes de la venta de acciones de empresas que coticen en bolsa.
Además, la reforma eliminará algunas exenciones a empresas, mayores impuestos a las exportaciones de petróleo, carbón y oro; impondrá tributos a las bebidas azucaradas y los alimentos ultraprocesados, a los plásticos de un solo uso y habrá un impuesto al carbono.
El presidente del Senado y miembro del partido de gobierno de Colombia, Roy Barreras, solicitó al ministro de Hacienda presentar un mensaje de urgencia para agilizar el trámite de la iniciativa, a pesar de que Gustavo Petro se había comprometido a no hacerlo.
Petro ha prometido no firmar nuevos contratos de exploración de petróleo para caminar hacia una transición energética, propuesta que ha despertado la incertidumbre en los mercados.