El ministro de Seguridad de Córdoba, Juan Pablo Quinteros, confirmó este miércoles que sólo en el valle de Punilla se quemaron 39 mil hectáreas a raíz de los incendios se desataron en la última semana en la zona de sierras y montes de la provincia, una de las más turísticas de la región. En Capilla del Monte, vecinas y vecinos se movilizan para reclamar por «el mal manejo de los incendios».
También confirmó que el foco en Villa Berna se encuentra contenido, y allí ya se quemaron otras más de 2 mil hectáreas. Quedan activos los de La Granja, donde disminuyó la actividad y bomberos voluntarios seguían con el trabajo; en Capilla del Monte (el fuego del lado oeste persistía con dirección a San Marcos Sierras en un sector denominado La Fronda); y finalmente, el incendio de Chancaní que sigue con actividad. Por los fuegos, prohibieron el ascenso al cerro Champaquí, al Uritorco y a Los Gigantes.
En diálogo con La Voz, el funcionario se mostró optimista respecto a la jornada en la zona de Capilla del Monte: “el frente está activo, pero podríamos decir que hoy le estamos ganando la batalla al fuego y mañana podríamos llegar a tener una muy buena noticia en esta zona”.
“Pese a las malas condiciones climáticas el trabajo de nuestros bomberos y del plan provincial están dando sus frutos”, agregó, evitando referirse a la ayuda (o falta de ella) del gobierno nacional, cuyas autoridades llegarán hoy a visitar la zona afectada.
El ministro aclaró que, pese a que el panorama es alentador, también existe la posibilidad de que el frente se vuelva a complicar: “le estamos ganando la batalla, pero es por hoy. Se esperan fuertes ráfagas de viento. Esperamos que no compliquen la tareas”.
Villa Berna, contenido y a la espera
Bomberos lograron contener en horas de la madrugada el avance del fuego en Villa Berna, uno de los cuatro focos que complican a la provincia de Córdoba en la última semana.
Según indicó Hernán Ponce, de Defensa Civil, el panorama es “alentador” aunque aún persisten puntos calientes que podrían ocasionar reinicios.
“Que el incendio esté contenido quiere decir que el perímetro esta con puntos calientes y en cualquier momento se puede volver a activar. No es lo mismo que extinguido”, aseguró a la prensa.
Cerró aclarando que “está todo habilitado en las rutas. No hay riesgo para nadie”. Y que aunque se esperan altas temperaturas para este jueves, hay confianza en poder extinguirlo.
Norberto García, titular de Defensa Civil de Los Cocos, contó que si bien están «más tranquilos ahora, esto no termina acá». Y amplió: «después también vienen tiempos duros cuando venga la lluvia porque si son fuertes bajarán todas las cenizas a los lagos y las fuentes de contención. En ese panorama, el agua va a ser una problemática».
Los incendios en Córdoba y el Ejército
Quien también llega a la zona de los fuegos cordobeses es el personal del Ejército. Así lo confirmaron desde el Ministerio de Defensa: «la Compañía Ingenieros Paracaidista 4 de la IV Brigada Aerotransportada está desplegando una base adelantada en apoyo a los brigadistas en la lucha contra los incendios, para brindar alojamiento, comida, agua potable y suministro eléctrico».
Vecinos y organizaciones sociales de la zona lo tomaron con precaución. «No vienen a ayudar a apagar los incendios, vienen a controlar a la población«, se quejaron en diálogo con este diario.
Sucede que han ocurrido episodios de violencia y reclamo en los últimos días por parte de habitantes del lugar hacia las autoridades por el accionar (en la mayoría de los casos las defensas comenzaron por los propios vecinos), por la falta de contención o por las metodologías utilizadas en la lucha contra el fuego.
En Capilla del Monte, vecinos y vecinas se convocaron para este miércoles a las 17 en la Plaza San Martín, como acción de visibilización y denuncia. La «enorme preocupación por el mal manejo de los incendios», según afirmaron, tiene a la comunidad de la región en permanente estado de alerta.
En las últimas horas ocurrió la agresión de un vecino de Capilla del Monte contra móviles de rescatistas del Equipo Técnico de Atención a Catástrofes (ETAC) de Córdoba.
La fiscal de Dean Funes, Analía Céspede, imputó al sujeto por “daños y lesiones” contra los móviles del Etac y rescatistas que acudieron a sofocar un incendio en un campo de su propiedad el pasado domingo.
Este miércoles, el hombre acusado presentó una contradenuncia contra los rescatistas por “abandono de persona”. Asegura que llegaron demasiado tarde al lugar del incendio.
Hay otro antecedente cercano del Ejército, que es mirado de reojo por la población: entre los días 28 de agosto y 5 de septiembre, se desató un importante incendio en La Reserva Natural de la Defensa La Calera, que arrasó con alrededor de 1.500 hectáreas. El fuego se inició en la zona del polígono de tiro “Quebrada de la Cancha”. Las miradas apuntaron al personal militar.
Sucede que al mismo tiempo en esa fecha “se realizaron variadas actividades de instrucción y adiestramiento de distintos elementos” en la reserva militar ubicada en la zona. Fueron “distintas actividades operacionales, principalmente instrucción militar y aerocooperación, con lanzamiento de paracaídas”, según comunicaron las autoridades de Defensa.
Luego de un arduo trabajo para apagar los fuegos, los especialistas responsabilizaron a las Fuerzas Armandas porque «prácticas negligentes» habrían ocasionado el principio del fuego. En las últimas horas, el Ejército anunció que inició una investigación interna para aclarar lo sucedido.
Repudio a la visita de Milei
Tras una semana de fuegos intensos, este miércoles pasado el mediodía llegará el presidente Javier Milei a Córdoba junto a su hermana y secretaria de Presidencia, Karina Milei, y la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, lo que motivó repudios de distintos arcos sociales y políticos.
Por ejemplo, desde ATE y la CTA Autónoma Córdoba que apuntaron a la llegada del mandatario «después de una semana de dramáticos incendios en la que la cooperación del gobierno nacional brilló por su ausencia. Todo fuego es político: Hasta el día de hoy han hecho oídos sordos al unánime reclamo de que se declare la Emergencia Nacional. Frente a la inacción de la casta, el pueblo se autoconvoca, organiza brigadas civiles y lucha denodadamente contra el fuego desatado en distintos lugares de las sierras”.
Se queman los recuerdos
Lupe Martínez, una maestra de plástica de San Esteban, es una de las afectadas por los incendios en el Valle de Punilla.
La docente vivía junto a sus dos hijas de 12 y 15 años en un hogar que fue arrasado: “se subió toda la casa. Acá estamos intentando… limpiar los restos”, relató Lupe en diálogo con Cadena 3.
Explicó que el incendio comenzó alrededor de las 10 y que, a pesar de los esfuerzos de los bomberos y de un avión hidrante, no se pudo contener el fuego: “era como una cosa dantesca. No se podía hacer nada”.
“Se quemó todo, cama, todo, todos mis recuerdos”, lamentó la docente. Juan Guevara, el Intendente, se comprometió a ayudarla a conseguir un alquiler temporal y gestionar recursos para la reconstrucción de su hogar.
“Estamos todos viendo cómo organizar las donaciones”, explicó Martínez, y agradeció a su amigo Bruno Moreno, un malabarista brasileño que comenzó a recaudar fondos en Brasil para ayudarla. Lupe cerró, reflexionando: “la gente más pobre al final también es la más solidaria”.
