En paralelo a las sesiones de la Asamblea General de Naciones Unidas, los gobiernos de Argentina y Estados Unidos lideraron una nueva ofensiva diplomática contra el Ejecutivo venezolano al impulsar una declaración en la que instan a las autoridades venezolanas “a poner fin a las detenciones arbitrarias y los abusos de derechos humanos”.

El texto contó con el apoyo de una treintena de naciones pero no pudo lograr que lo firmaran países como Brasil, Colombia, México y Chile, con lo cual su impacto es limitado.

La nueva ofensiva fue liderada en un encuentro encabezado por la canciller Diana Mondino y el secretario de Estado norteamericano, Antony Blinken.

“Es fundamental que se permita a los venezolanos expresar sus opiniones políticas forma pacífica, incluso mediante el ejercicio de la libertad de reunión y expresión pacíficas, sin temor a represalias. Exigimos que se ponga fin al uso excesivo de la fuerza, la violencia política y el acoso contra la oposición y la sociedad civil”, reza el escrito.

Además, expresa que “es el momento para que los líderes venezolanos comiencen unas discusiones constructivas e inclusivas de cara a una transición con garantías para ambas partes y solucionar así este impasse político y restablecer pacíficamente las instituciones democráticas”.

El texto se refiere al candidato opositor Edmundo González Urrutia, ahora exiliado en España, como la persona que ganó “la mayoría de votos” de acuerdo a “las actas electorales disponibles públicamente”.

La declaración fue firmada por 32 delegaciones: Argentina, Australia, Austria, Bosnia y Herzegovina, Canadá, Costa Rica, Croacia, Dinamarca, República Dominicana, Estonia, Unión Europea, Alemania, Guatemala, Guyana, Hungría, Irlanda, Italia, Kosovo, Letonia, Lituania, Luxemburgo, Países Bajos, Panamá, Perú, Portugal, Eslovenia, España, Suecia, Ucrania, Reino Unido y Estados Unidos

Venezuela rechaza las “aspiraciones golpistas”

El Gobierno de Venezuela calificó de “infamias y aspiraciones golpistas” dicha declaración conjunta

«Venezuela rechaza el comunicado redactado por el Departamento de Estado de los Estados Unidos de América, suscrito por un puñado de sus gobiernos satélites para atacar al pueblo venezolano, no es más que un acumulado de infamias, distorsiones y aspiraciones golpistas, cuyo epílogo será, como siempre, un estrepitoso fracaso», señala el comunicado difundido por el canciller Yván Gil.

Al respecto, el Gobierno de Nicolás Maduro aseguró que Washington y sus aliados «fracasarán» nuevamente en su intento de aislar a su país.

«El señor Blinken [secretario de Estado de EEUU] y su «comandito» de países lacayos intentan reeditar la iniciativa del exvicepresidente Pence cuando, en 2019, falló en un intento similar de aislar a Venezuela», destaca el texto.

De igual manera, Caracas denunció que la declaración conjunta busca invocar la defensa de los derechos humanos, cuando al mismo tiempo EEUU agrede al país con sanciones económicas.

«En este comunicado ridículo pretenden invocar la defensa de los derechos humanos del pueblo venezolano mientras lo agreden con casi 1.000 medidas coercitivas ilegales y planifican acciones terroristas contra sus autoridades, servicios públicos en instituciones, para desconocer su voluntad democrática e imponer, como en 2019, a un nuevo títere», indica el documento.

GS con información de Xinhua, Europa Press y Sputnik