En el marco de una impresionante movilización popular por el Día de la Memoria, los organismos de derechos humanos manifestaron su rechazo a las políticas de ajuste del gobierno de Javier Milei y la compararon con el programa económico de la última dictadura: “El gobierno de Milei y Villarruel está ejecutando la reedición de la miseria planificada por Martínez de Hoz”. Reclamaron la continuidad de las políticas de Memoria, Verdad y Justicia y repudiaron el negacionismo demostrado por el Poder Ejecutivo.
En una Plaza de Mayo repleta como hacía muchos años no se veía, el primer acto fue encabezado por Abuelas de Plaza de Mayo, Madres – Línea Fundadora, Familiares de desaparecidos y detenidos por razones políticas, H.I.J.O.S. Capital, la APDH, el CELS, la Liga Argentina por los Derechos Humanos, entre otras organizaciones, bajo la consigna “30.000 razones para defender la patria. Nunca más miseria planificada”.
El documento consensuado fue leído por Estela de Carlotto, Adolfo Pérez Esquivel y Taty Almeida, quienes cerraron el acto al grito de “siempre estuvieron, estarán y seguirán estando: 30 mil detenidos, desaparecidos, presentes”.
En su discurso, los organismos rechazaron el negacionismo y las políticas del gobierno nacional que intentan reforzar el poder de sectores militares.
“Frente a este gobierno que pretende restablecer la teoría de los dos demonios y reivindica el terrorismo de Estado, seguimos reclamando una ley contra el negacionismo que sanciones a funcionarios y funcionarias y representantes elegidos que desestimen los crímenes y a sus víctimas”, leyó la titular de Abuelas de Plaza de Mayo y señaló que “la participación de las Fuerzas Armadas en conflictos internos es contraria a su ley y pone en riesgo los derechos humanos de todos”.
Los organismos llamaron a seguir “defendiendo las políticas de Memoria, Verdad y Justicia construidas sobre consensos democráticos y sostenidas por trabajadoras y trabajadores”. En ese sentido, repudiaron los despidos en la Secretaría de Derechos Humanos y exigieron su reincorporación y pidieron que la emblemática cartera, hoy en manos de Alberto Baños, continúe como querellante en los juicios de lesa humanidad. Exigieron, además, la continuidad de las políticas de memoria, verdad y justicia impulsadas por la Secretaría y la preservación de los sitios y espacios de memoria de todo el país.
“Seguimos exigiendo juicio y castigo a todos los culpables”, señalaron. “Todavía falta mucho, los responsables civiles continúan impunes, son el poder económico y empresarial del genocidio, para ellos también exigimos juicio y castigo ya. Y seguimos reclamando y preguntando donde estas los cuerpos de nuestros desaparecidos, donde está Julio López”, sostuvieron.
“Desde el reinicio de los juicios señalamos nuestra preocupación por los beneficios otorgados a condenados y detenidos. Del total de represores investigados, la gran mayoría ya falleció o atraviesan procesos de libertad. Los detenidos son menos de 700 y más del 75% están en arresto domiciliario”, recordó Estela y añadió: “Son delitos que no prescriben y sus condenas deben ser de cumplimento efectivo. Las constantes provocaciones de Milei y Villarreal en sentido contrario, violan todos los pactos internacionales que tienen rango constitucional”.
Por último, la referente de Abuelas destacó la lucha por restituir la identidad de unas 300 personas, la mayoría nacida en maternidades clandestinos de la dictadura, que hoy son adultos de entre 43 y 49 años. “Ayudemos a Abuelas y a sus familias legitimas a encontrarlos. Ayudemos a que todas las personas que tengan dudas sobre su origen se acerquen a nosotras y puedan transitar el camino de la verdad”, manifestó.
Miseria planificada
“El gobierno de Milei y Villarruel está ejecutando de manera brutal y acelerada el plan de ajuste más despiadado de estos 40 años de historia democracita. Es la reedición de la miseria planificada por Martínez de Hoz y lo único que genera este plan son ganancias extraordinarias para unos pocos y el hambre para la mayoría”, leyó Pérez Esquivel, a su turno.
Manifestó la preocupación por “el retorno de figuras representativas del mundo militar a la vida política y a posiciones de gestión, especialmente en la conducción política de las Fuerzas Armadas y la conducción de la AFI”.
“Tenemos 30 mil razone para defender la patria. Nunca más miseria planificada”, sostuvo Taty Almeida y llamó a la unidad de los partidos políticos, de los movimientos de derechos humanos, sociales, feminismo y sindicales “para organizar la resistencia y las alternativas necesarias para poner fin a tanto sufrimiento. Si un gobierno no está al servicio del pueblo, está en contra del pueblo”.
“Queremos un pueblo feliz y para eso tiene haber pan, paz, trabajo y libertad. A 48 años del golpe genocida, construiremos una patria para el pueblo, con memoria, verdad y justicia para siempre. Nunca más el silencio”, cerró Taty.