El domingo, luego de una reunión que mantuvo con el presidente de la Argentina Javier Milei por un lapso de poco más de una hora, la directora gerente del FMI Kristalina Georgieva, anunció que una misión del Fondo visitará la Argentina “la próxima semana” con el propósito de discutir “un nuevo programa”.

La titular del organismo calificó la reunión de “excelente” y aseguró que la misma se dio en el marco de “un gran progreso que la Argentina ha hecho para bajar la inflación, estabilizar la economía y hacer que la economía crezca”.

Los elogios de la funcionaría dirigidos a la gestión de Javier Milei continuaron señalando que “la gente está empezando a ver algunos de los beneficios”. Y, sin datos oficiales disponibles, afirmó que “la pobreza está comenzando a descender”.

A la vez, adelantó que “discutimos sobre el futuro de nuestra cooperación y vamos a estar trabajando con un nuevo programa. Un equipo viajará a Buenos Aires la próxima semana”.

Tensión por el tipo de cambio

Las declaraciones se dan días después que el comité evaluador del organismo emitiera un extenso informe de “evaluación ex post” en el que se analizan los resultados del acuerdo de facilidades extendidas que la Argentina selló en 2022 en el que se revisaron los términos del original pautado en 2018. El informe, asegura que el acuerdo no pudo alcanzar sus objetivos y metas porque subestimó el curso de la economía en 2023 aunque, aseguran, “una importante corrección del rumbo llevada a cabo por el gobierno de Milei” ayudó a la Argentina “a evitar una crisis en toda regla y dar pasos importantes hacia la estabilización macroeconómica”.

El documento, si bien insiste en la necesidad de que la Argentina devalúe su moneda con el propósito de acumular reservas para afrontar los vencimientos de deuda, reconoce que el crawling peg del 2% resultó fundamental para anclar expectativas de inflación y tipo de cambio a contramano de la orientación que el directorio del organismo había exigido a las autoridades económicas.

El comité evaluador, de hecho, señala que «El firme programa de desinflación tuvo éxito principalmente porque Argentina siguió las políticas y perspectivas de las autoridades sobre las tasas de interés y las políticas cambiarias, incluso si estas no estaban completamente alineadas con las del FMI

El directorio consideró que la evaluación realizada por la comisión sobre su propio accionar resultó adecuada y, por lo tanto, es de prever que las presiones para una devaluación del 20% o una inmediata unificación del tipo de cambio, amainen o directamente se posterguen al menos hasta las elecciones de octubre.

La misma Georgieva destacó que las metas fiscales alcanzadas por el gobierno, o sea el ajuste, superaron incluso las propias expectativas y metas impuestas por el organismo. Además, el gobierno prepara una profunda reforma laboral, previsional y tributaria que el organismo ve con buenos ojos y podrían resultar la moneda de cambio para, como mínimo, tolerar un mayor atraso cambiario y, de máxima, autorizar nuevos giros que le permitan al gobierno sostener el dólar barato y dar continuidad a la bicicleta financiera conocida como carry trade al menos unos meses más.

El equipo económico aspira a recibir un nuevo desembolso de entre US$ 10 mil y U$S 15 mil millones. Luis Caputo, ministro de economía, participó del cónclave y continuó luego de la reunión con Georgieva en un intercambio con el funcionario a cargo de la negociación con la Argentina, Luis Cubeddu.