Aunque también participaron de la movilización a la Plaza de Mayo, las agrupaciones de derechos humanos, las organizaciones sindicales y los partidos de izquierda nucleados en el Encuentro Memoria Verdad y Justicia eligieron concentrarse aparte y dieron a conocer un documento propio. Lo hicieron a continuación del discurso que pronunció Estela de Carlotto.
Entre los integrantes del Encuentro se hicieron ver las banderas de la CTA Autónoma, la Coordinadora Sindical Clasista, ATE Nacional, Judiciales bonaerenses, la seccional Oeste del Sarmiento de la Unión Ferroviaria y tercerizados de esa línea, además de los docentes universitarios de AGD y los jóvenes de la Federación Universitaria de Buenos Aires (FUBA). También estuvieron organizaciones de derechos humanos como Correpi y el Centro de Profesionales por los Derechos Humanos (CEPRODH) y hubo columnas del Partido Obrero, el PTS, Izquierda Socialista, MAS, MST, PRT, PSU y Poder Popular. Entre los movimientos sociales se destacaron las columnas de la Corriente Clasista y Combativa, la CTEP y el Polo Obrero.
En el documento que dieron a conocer, denunciaron el salto en la política represiva y de impunidad desplegada por el gobierno nacional, con la prisión domiciliaria dictada a favor de genocidas que son símbolo de la represión dictatorial como Miguel Osvaldo Etchecolatz y la defensa del gatillo fácil, con la doctrina Chocobar, respaldada por el mismísimo presidente Macri. Además pidieron justicia por las muertes de Santiago Maldonado y Rafael Nahuel y reclamaron la libertad de los presos políticos. En ese grupo incluyeron a César Arakaki, Dimas Ponce y Sebastián Romero, quienes están sometidos a procesos judiciales (los dos primeros estuvieron en prisión) tras la represión a las movilizaciones del 14 y 18 de diciembre del año pasado, cuando se trató la reforma previsional. El Encuentro rescató que esas dos jornadas, como la marcha del 8 de marzo por el Día de la Mujer, demuestran que nuestro pueblo está de pie para seguir peleando contra el ajuste y la represión y para exigir nuevos derechos.