El Centro Cultural Kirchner (CCK) inicia una nueva etapa en la que sumará, a su circuito de actividades de música, artes visuales, literatura, cine, infancias, artes performáticas y educación, una programación especial dedicada al teatro, a cargo del productor Pablo Silva. Se trata del ciclo Corazón iluminado, que convoca a artistas de distintas áreas y espacios a pensar el amor por fuera de su idea romántica. Así, entre el 14 de febrero y el 10 de marzo se podrán ver, siempre a las 20 y en la Sala Argentina, El amor es una mierda, de Cecilia Meijide; Una obra para mí, dirigida por Sebastián Suñé; y Escorpio, de Julieta Otero.
De esta forma, el centro cultural se propone como un espacio multidisciplinario, abierto e inclusivo, con una propuesta artística y educativa, federal, plural, al alcance de todos y en diálogo con las vanguardias. En ese sentido, este será el primero de una serie de nuevos ciclos especiales que se desarrollarán a lo largo del año, donde la escena teatral tendrá un lugar destacado.
La primera pieza, de Cecilia Meijide, cuenta actuación de la actriz Vanesa Maja, y cuenta la historia de una mujer que se prepara para encontrarse con su expareja. Habrá tres funciones: 14, 17 y 18 de febrero. Por su parte, los días 21, 24 y 25 se presentará Una obra para mí, con dramaturgia, actuación y co-dirección de Sebastián Suñé. Con un elenco que completa Francisco Bertín, la propuesta oscila entre la comedia y el drama, el deseo y la crítica social, la risa y el duelo.
La tercera propuesta es Escorpio, de Julieta Otero. Protagonizada por Miguel Ferrería y Sofía González Gil, esta comedia está enfocada en una pareja que convive en un pequeño departamento, un espacio que funciona como el ring de una disputa de identidades. La pieza se podrá ver los días 1, 2 y 3 de marzo.