Cuando transcurrían los discursos en el palco principal de la marcha en defensa de la educación pública y hacía uso de la palabra Taty Almeida, la vicepresidenta Victoria Villarruel publicó un tuit de una agresividad y una crueldad inusitadas. Fueron solo cinco palabras, lo suficientemente descriptivas de su pensamiento y sobre todo de su sentimiento, que resulta muy difícil no emparentarlo con un odio profundo: «Hebe, lo que te perdiste…», escribió Villarruel en referencia a Hebe de Bonafini, fallecida en noviembre de 2022.

Semejante agravio, no solo para quien fuera una de las fundadoras de la Asociación Madres Plaza de Mayo y para todos los organismos de Derechos Humanos, sino también para los millones de argentinos que la recuerdan con admiración y mantienen vivo su legado en defensa de la democracia, va en línea con el negacionismo que Victoria Villarruel ha demostrado siempre sobre el terrorismo de Estado ejercido por la dictadura cívico militar.

Entre tantos comentarios a favor que recibió lo escrito por la vicepresidenta, quizás valga la pena la reflexión de una respuesta en contra: «Videla también se la perdió, pero con una diferencia: él lo hubiese mirado desde la cárcel, Hebe en cambio hubiese estado en la Plaza».

Foto: Florencia Downes / Télam