El nuevo texto del proyecto de Ley de Bases que envió el Poder Ejecutivo al Congreso, y que ya tiene dictamen para tratarse (y votarse) este lunes constituye un nuevo ataque a los derechos de las mujeres por parte del gobierno de Javier Milei. Esta vez, va contra la posibilidad de jubilarse a los 60 años.
La modificación planteada a través del proyecto de ley consiste en la eliminación de la moratoria previsional (el 75% de quienes acceden son mujeres), la creación de una Prestación de Retiro Proporcional, destinada a personas que cumplieron 65 años y no completaron 30 años de aportes necesarios para jubilarse, quienes accederían después de esa edad a una Prestación Universal al Adulto Mayor.
De este modo, Javier Milei da un paso más en agrandar la brecha de género que en los últimos años se trabajó intensamente para reducir. De acuerdo al informe emitido por ACIJ y ELA en marzo, ANSES, informó que 6 de cada 10 mujeres que están jubiladas, lo hicieron a través de la moratoria.
Se trata de mujeres que dedicaron gran parte de su vida a tareas de cuidado no remunerado o trabajaron en el sector informal. También trabajadoras de casa particulares que en los últimos años habían podido registrar sus aportes a través del Programa Registradas que fue eliminado por el DNU 70/2023.
«La eliminación de la moratoria implica que 9 de cada 10 mujeres pasarán a la PUAM que rige desde los 65 años, no se acumula con pensión y es 20 por ciento menor que la jubilación mínima”, explicó la diputada Myriam Bregman a través de sus redes sociales.
También la economista Mercedes D’Alessandro (exdirectora del área de género hoy inexistente en el Ministerio de Economía) planteó en su cuenta de X.
«En nuestro país, las mujeres realizan el 75% de las tareas de cuidados. Por eso tienen tasas más bajas de actividad, formalidad, menores salarios y mayores niveles de desocupación. Trabajan el doble, pero su trabajo no cuenta. Y pocas veces pueden aportar. Las desigualdades en el mercado laboral producen que solo 11% de las mujeres de entre 55 y 59 años cuenten con más de 20 años de aportes. Es decir, solo 1 de cada 10 mujeres próximas a jubilarse está en condiciones de hacerlo. La maternidad penaliza a las mujeres a la hora de trabajar. Cuantos más hijos tienen menos aportes a la seguridad social acumulan. Es por eso, que la mayor parte de las personas que pudieron jubilarse con las moratorias son mujeres. Las moratorias permiten pagar la deuda previsional, completar los aportes que no se pudieron hacer por todos estos motivos (y más) y jubilarse». Los datos forman parte de las sistematizaciones realizadas durante la gestión pasada.
Por su parte, la economista Lucía Cirmi expresó. «En la Ley de Bases cortan la moratoria previsional en nombre de la ‘insostenibilidad’ del sistema, pero a mí no se me ocurre nada más insostenible que dejar a las personas mayores cobrando $152.000 por mes (PUAM) y a las mujeres que hoy tienen entre 60 y 65 años sin nada».
También la referenta de la organización Ni Una Menos, Luci Cavallero, se refirió a la pretensión de eliminar la moratoria previsional. «Las feministas lo venimos denunciando en la calle desde 2018. Ya sabemos que la deuda se paga con nuestro trabajo no pago», expresó.
La organización Ni Una Menos que viene trabajando intensamente en los reclamos contra las retrocesos en materia de derechos de mujeres y diversidades que plantea este gobierno, también denunció las reformas que plantea la Ley de Bases.