En un fuerte documento, los economistas y docentes de la Universidad de Buenos Aires enrolados en la cátedra abierta Plan Fénix denunciaron la “reiteración de antiguos prejuicios” en las ideas de achicamiento del rol del Estado por parte de varios candidatos presidenciales. En particular, se refirieron a “la deslegitimación del Estado” y a los riesgos de la “mercantilización extrema de la vida social”.
El texto, con un claro contenido político pero basado en argumentos económicos, fue publicado en el sitio de la cátedra Plan Fénix, sucesora del grupo de investigadores, investigadoras y docentes de la Facultad de Economía de la UBA que en el año 2000, cuando se incubaba la crisis de la convertibilidad, se reunieron para “analizar la situación del país, elaborar ideas y proponer estrategias que contribuyeran a resolver los problemas existentes, crecer con equidad y erradicar la pobreza”. Es coordinado por el profesor Alberto Müller y lo integran una treintena de economistas de prestigio y larga trayectoria en el campo de la investigación académica.
La declaración, que profundiza sobre ideas expuestas en la campaña electoral, rechaza la idea de que el Estado sea “el origen de todas las patologías presentes” y reivindica tanto su pasado histórico, como constructor de la Nación Argentina, como también su papel en el desarrollo de la economía. También desmiente la idea de que los impuestos que cobra el gobierno son abusivos: “De hecho, el promedio de tributación en los países de la OCDE es en la actualidad del 33,6% (del PBI) con un máximo del 47, 1% en Dinamarca. Francia e Italia superan el 40%; Alemania y muchos otros superan el 35%. En Argentina dicho nivel ha sido del orden del 30%”.
“Sostener dogmáticamente que el sector privado es más eficiente desconoce las distorsiones de mercado propias de estructuras monopólicas u oligopólicas, muchas de ellas compuestas por grandes empresas transnacionales que precisamente se benefician de la debilidad o ausencia del Estado y de marcos legales transparentes, en su incesante búsqueda de mayores ganancias”, destacan los economistas del grupo Fénix.
El documento también incursiona en dos temas candentes. “Con relación a la acuciante cuestión de la inflación, ella no es solo un mero producto de malas políticas monetarias. Es la manifestación de fuertes pujas distributivas, en un comportamiento espiralizado, no solo entre empresarios y trabajadores, sino también entre empresarios; el objetivo es no perder posiciones, en una suerte de retorno a la Ley de la Selva”, manifiesta. La reivindicación del Estado fuerte también alcanza a otra cuestión clave: la relación con el Fondo Monetario Internacional. “El irregular y nefasto préstamo del FMI —una operación incongruente con las pautas de operación del propio prestamista— deberá ser renegociado. Para ello, se requiere que exista un gobierno internamente fuerte, que opere con coherencia y energía incluso en el plano diplomático. La ciudadanía debe conocer y asumir los pormenores de este salvaje e innecesario endeudamiento”, se señala.
En una clara advertencia sobre la inviabilidad de las ideas libertarias, el escrito afirma que “las políticas de mercado propuestas para la educación y la salud públicas (supresión de la provisión directa por parte del Estado, mediante sistemas de pago privados) sólo aumentarán la brecha social” y deja una fuerte sentencia: “La mercantilización extrema de la vida social es una utopía; pero intentar alcanzarla supone una pesadilla”.
Carolina Ragazzon
27 September 2023 - 11:35
cuando el descontrol por parte del estado es evidente, el ataque es total y generalizado. SI los controles funcionaran, NO existirían los avivados que SI viven de todos nosotros, del estado. Seamos coherentes. Hay demasiados avivados colgados que NO deberían ser más mantenidos por todos nosotros. Estado sí, Avivados colgados NO más.