Poco antes de partir hacia Washington para reunirse con la titular del FMI, Christine Lagarde, el ministro de Hacienda y Finanzas, Nicolás Dujovne, pasó por la estética televisiva que lo catapultó al poder. «Mi agenda es encontrar términos más flexibles del acuerdo que firmamos en junio. Lo que permitiría adelantar a 2019 el financiamiento disponible para 2020 y 2021», le dijo al profesor de Historia, Carlos Pagni, conductor del programa Odisea Argentina, que ahora se transmite por la señal televisiva del diario La Nación pero que comenzó en el canal Todo Noticias, del Grupo Clarín, donde Dujovne era el co-conductor. Fue la primera vez que el actual ministro vuelve a la emisión, transformada en una zona de confort en el medio de la crisis, donde anticipó parte de los movimientos que desplegará apenas llegue a la capital norteamericana, luego de las 9 de la mañana.
Cuando lo haga, aterrizará designado como nuevo «ministro de Economía», tras la fusión con la cartera de Energía, conducida por Javier Iguacel, que ahora será secretario de Estado, bajo el mando de Dujovne. Así lo anunció en el programa televisivo y confirmó el proceso de «reconstrucción de la autoridad económica», anticipado por este diario, que forma parte del derrotero que diseñó Macri luego de la primera corrida cambiaria de mayo.
También podés leer: Dujovne va al FMI a buscar U$S 12 mil millones para pagar deudas en 2019
Fuentes vinculadas al flamante titular de Economía confirmaron que en la capital estadounidense buscará activar la «salvaguarda para ampliación del gasto social equivalente a 0,2% del PBI», que se canalizarán a través de los programas Asignación Universal por Hijo, Asignación Universal por Embarazo y Asignaciones familiares (incluidos monotributistas)», según establece el acuerdo de endeudamiento. Aunque todavía la solicitud deberá ser tramitada ante el directorio del Fondo, el Gobierno ya comenzó a comunicar oficialmente dos pagos extraordinarios de 1.500 pesos en septiembre y noviembre para los beneficiarios de ese subsidio. Una muestra de la urgencia que tiene el Gobierno para comunicar la crisis, recuperar la iniciativa y paliar el inicio de un ciclo recesivo, de seis a nueve meses, marcado por una alta inflación, pérdida de puestos de trabajo y estancamiento de la economía.
Todavía se desconoce el impacto del traslado a precios de la última corrida cambiaria, pero podría ser el disparador del «waiver» que pedirá Dujovne ante el directorio del Fondo: un perdón ante el incumplimiento de alguna de las cláusulas previstas que, en este caso, estaría basado en la tasa anual de inflación, que podría superar el techo del 32% previsto con el organismo financiero.
Hasta ahora, la única escala que aparece en la agenda de Dujovne es la reunión con Lagarde y sus técnicos desde el mediodía, pero es posible que sume una reunión con el secretario del Tesoro de los Estados Unidos, Steven Mnuchin. El voto de Washington en el directorio del FMI fue determinante para el programa extraordinario de endeudamiento, a través del subdirector gerente del organismo, el estadounidense David Lipton, segundo de la francesa Lagarde.
Una parte de la atención de Dujovne estará puesta en la respuesta de Wall Street ante los anuncios de este lunes, que fue feriado en los Estados Unidos. La bolsa neoyorkina comenzará a operar este martes y su respuesta sobre los bonos y acciones de empresas argentinas serán un termómetro sobre las expectativas del mercado estadounidense respecto a la capacidad de Macri para conducir la crisis.
Este viernes, mientras Macri empezaba a definir la reducción del Gabinete a la mitad, la Casa Blanca confirmó que el presidente norteamericano Donald Trump participará de la cumbre del G-20 en Buenos Aires, y adelantará su llegada para el 29 de noviembre, por un día, para visitar oficialmente a su par argentino. El gesto forma parte de los refuerzos de emergencia que recibe la administración de Cambiemos, desde la nueva depreciación cambiaria, a pedido del Presidente, que el miércoles pasado anunció una serie de medidas del Fondo, que Dujovne comenzará a negociar en persona desde este martes.
Los anuncios que hizo Macri y la respuesta de los mercados con la escalada del dólar contaron con un testigo inesperado de la administración Trump en Buenos Aires, que pasó inadvertido en medio de la aceleración de la crisis, aunque vino de visita protocolar para participar de la Conferencia Sudamericana de Defensa 2018 (SOUTHDEC), dedicada a las “Contribuciones militares sudamericanas hacia la paz global”. Se trata del almirante Kurt W. Tidd, jefe del Comando Sur del Ejército de los Estados Unidos, que dos días después viajó a Puerto Belgrano para recibir una condecoración por la asistencia en la búsqueda, sin éxito, del submarino ARA San Juan, desaparecido junto a sus 44 tripulantes. Tidd pasó por Buenos Aires tres semanas después de la gira que protagonizó el secretario de Defensa, ex general James Mattis, por Brasil, Argentina, Chile y Colombia.