La explosión de un paquete en la sede de la Sociedad Rural Argentina (SRA) sigue generando especulaciones y posturas enfrentadas. Si bien en un primer momento la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, afirmó que se trataba de un atentado ejecutado por «anarquistas o extremistas veganos», desde la propia SRA descartaron esa hipótesis, señalando otras posibles motivaciones.
Marcos Pereda, vicepresidente de la entidad agropecuaria, fue uno de los primeros en desmentir la versión de Bullrich. Afirmó que es prematuro atribuir el ataque a un grupo en particular sin datos concretos y destacó que, por lo general, las acciones de los activistas veganos suelen estar acompañadas de mensajes explícitos, cosa que no ocurrió en este caso.
En su lugar, Pereda dejó entrever que hay quienes especulan sobre un posible vinculo entre el atentado y las tensiones políticas actuales, particularmente relacionadas con el rechazo del decreto de necesidad y urgencia (DNU) que otorgaba fondos a la SIDE, lo que generó fricciones en el gobierno.
Por otro lado, Patricia Bullrich insistió en que se está investigando el ataque bajo la hipótesis de terrorismo y que la pesquisa esta avanzando con la identificación del lugar de origen del paquete y la persona responsable. Sin embargo, aún no se reveló la identidad del autor.
El presidente de la SRA, Nicolás Pino, también se pronunció sobre el incidente. Durante una conferencia de prensa, desestimo que el ataque este relacionado con su cercanía al presidente Javier Milei, con quien mantiene una relación de «empatía personal», pero aclaro que no tiene miedo tras lo ocurrido. «No creo que esto tenga que ver con mi relación con el Presidente. Es un hecho lamentable, pero confío en que se aclarar pronto», declaró Pino.
A pesar de la gravedad del episodio, las actividades en La Rural se retomaron con normalidad, aunque con mayores medidas de seguridad. «Vamos a seguir trabajando por el sector agropecuario, porque aun hay mucho por desarrollar», concluyó Pereda.