Primero fue la universitaria. Después la antifascista a partir de los ataques del presidente Javier Milei al colectivo LGBTTIQ+. Ahora, desde el Hospital Garrahan instan a una tercera Gran Marcha Federal. ¿El motivo? Salud.
«No podemos seguir con luchas sectoriales. Necesitamos una medida masiva, como la de las universidades o la marcha de las diversidades, porque solo así podremos resistir este plan de muerte», sostuvo Norma Lezana profesional del Garrahan.
Salud aislada del mundo
Este miércoles el Gobierno declaró la salida de Argentina de la OMS, lo que implica menor acceso a vacunas y medicamentos caros; aislamiento para el Incucai y Malbran; recorte de fondos en enfermedades transmisibles y no asistencia internacional ante emergencias por catástrofes naturales.
Además de consecuencias sanitarias, de seguimiento de brotes y de promoción de transferencia de tecnología, costaría dinero: no se podrían comprar vacunas y tratamientos para VIH a través de su fondo rotatorio, que abarata muchísimo los costos.
La salida de Argentina de la OMS implica menor acceso a vacunas y medicamentos caros; aislamiento para el Incucai y Malbran; recorte de fondos en enfermedades transmisibles y no asistencia internacional ante emergencias por catástrofes naturales.
— Alan Longy ⭐⭐⭐ (@AlanLongy) February 5, 2025
Informe de Soberanía Sanitaria pic.twitter.com/2FrtScE4Ff
Este anuncio llega en medio de una grave crisis de la salud pública: cientos de despidos que ponen en situación crítica la atención de áreas claves como VIH/Tuberculosis, Enfermedades Inmunoprevenibles o Vacunas. El desmantelamiento del Hospital Bonaparte, el ajuste en el Posadas, la falta de envíos de fondos a las provincias, y la desregulación de prepagas y medicamentos que elevó enormemente los precios. Miles de personas apelan al sistema público, el cual a su vez se ve explotado y sin recursos.
La propuesta del Garrahan
El Garrahan es uno de los centros que viene sufriendo el ataque oficial, con falta de inversión y negación a los reclamos de las y los profesionales de la salud por aumentos salariales. En ese marco es que la secretaria general de la Asociación de Profesionales y Técnicos del Hospital Garrahan (APyT), Norma Lezana, convocó a realizar la Tercera Gran Marcha contra las políticas del presidente Javier Milei, una marcha nacional en defensa de la salud, contra «este plan de muerte».
La licenciada Lezana convocó a esta medida masiva en defensa de la salud pública argentina durante un nuevo «abrazo» simbólico al Ministerio de Salud de la Nación, en protesta por los más de 360 despidos en el área de VIH, Hepatitis, ITS y Tuberculosis, entre otras áreas, donde quienes protestaban recibieron ataques por parte de los efectivos policiales.
«No podemos seguir con luchas sectoriales. Necesitamos una medida masiva, como la de las universidades o la marcha de las diversidades, porque solo así podremos resistir este plan de muerte», sostuvo.
Lezana, quien lidera la Asociación de Profesionales y Técnicos del Hospital Garrahan (APyT), denunció que el gobierno del presidente Javier Milei y el ministro de Salud, Mario Lugones, continúan con un plan que «destruye directamente» al hospital pediátrico de referencia en Argentina, mediante recortes salariales y despidos que afectaron a cientos de trabajadores altamente capacitados.
Lucha contra el desmantelamiento
«Estamos luchando desde 2024 contra este plan que busca desmantelar el Garrahan, precarizar a sus trabajadores y recortar programas esenciales como el de VIH, que son vitales para la salud de la población», afirmó Lezana.
Lezana también criticó la inacción de la Confederación General del Trabajo (CGT) y llamó a construir una resistencia desde las bases, en conjunto con otras organizaciones de salud, sindicatos independientes y sociedades científicas. «Hemos tejido una red durante 2024 que incluye a pacientes, trabajadores y organizaciones sociales. Ahora debemos juntarnos para decidir colectivamente el siguiente paso», afirmó.
Los despidos, que afectaron a un 40% del personal de la Dirección de Respuesta al VIH, Hepatitis, ITS y Tuberculosis, generaron alarma entre las organizaciones de pacientes y profesionales, quienes advierten sobre el impacto directo en la atención de enfermedades de alta complejidad.