La motosierra de Milei acelera el pulso en el contexto de las fiestas de fin de año. A los despidos masivos en la Secretaría de Derechos Humanos y el cierre del Centro Cultural Haroldo Conti, se suman las cesantías de tres trabajadores de la Secretaría de Cultura, a cargo del ex productor teatral Leonardo Cifelli. Desde la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) denuncian que se trata de despidos “injustificados y persecutorios”. Estos tres últimos, además, se suman a los 300 despidos que se produjeron en esa Secretaría en 2024.

«El viernes pasado a la noche comenzaron a llegar mails notificando nuevos despedidos en la Secretaría de Cultura. Veníamos discutiendo con la gestión de Cifelli una docena de casos, explicando el expertise y las tareas de cada compañero, pero se pusieron inflexibles con tres, que nosotros consideramos parte de un intento de disciplinar a las y los trabajadores ya sea porque pertenecían a una área que adhirió a varias medidas gremiales como el último paro del  5 de diciembre o la coordinadora del área de redes que se negó en septiembre a armar una lista de despidos», dijo a Tiempo Nicolás Rodríguez Saá, Secretario General de ATE Cultura.

En el caso de la coordinadora de redes, se trata de una trabajadora con diez años de experiencia en el área de comunicación de distintos organismos del Estado. A partir del 2021, pasó a estar a cargo de las redes sociales del Ministerio de Cultura, que con el inicio del gobierno de Milei descendió al rango de Secretaría. “Con la nueva gestión me empiezan a desplazar de tareas y de algunas funciones”, dijo a este diario la trabajadora cesanteada, que prefirió el anonimato.

Según sus declaraciones, el gobierno decidió disminuir el trabajo de las redes de la Secretaría al inicio de la gestión libertaria. “La cultura tiene un perfil de celebración que no querían mostrar, por lo tanto estaba muy limitado lo que se podía informar o comunicar desde nuestra Secretaría así que lo que nos pedían era que fueran contenidos atemporales, como por ejemplo, efemérides culturales”, expresó. En ese interín, según comentó a Tiempo, la indicación de la Secretaría fue que el equipo de redes pasara a ocuparse de las redes de Leonardo Cifelli, “tanto de la producción de contenidos como de la publicación directa”, aseguró.

Leonardo Cifelli
Foto: X (@leociffeli)

Paradoja: despidos y nuevas contrataciones

“En cada una de las olas de despidos (NdR: en Cultura se registraron cesantías en mayor parte en marzo y en diciembre en el marco del ajuste del gobierno de Milei y del DNU 84) nos fueron achicando al equipo de redes sociales”, dijo y continuó:

“En los despidos de diciembre me llaman para decirme que necesitaban seis nombres para despedir de mi equipo. Me negué a confeccionar esa lista y aun así los despidieron. De un equipo de once personas, quedamos dos: un compañero mío y yo que era la coordinadora. Y ahora, en nuestro lugar, la Secretaría contrató a dos personas nuevas para poner a cargo de las redes sociales del propio Cifelli”, dijo.

Según el comunicado de ATE, los otros dos trabajadores cesanteados tenían tareas que cumplían con idoneidad y amplia experiencia en el área. “El despido del área de Sonido es directamente un intento de disciplinamiento a les trabajadores del sector ante la adhesión a varias medidas gremiales. El compañero despedido es el subcoordinador del área, un profesional con amplia trayectoria y más de 9 años de antigüedad en el Centro Cultural Kirchner, que incluso aportaba su propio equipo para tareas de postproducción”, dice el comunicado.

Foto: AFP

Las medidas gremiales de ATE durante la gestión libertaria estuvieron destinadas a la recomposición salarial de los estatales, que en 2024 registraron una pérdida del 40% en el poder adquisitivo; el rechazo al Sistema de Evaluación Pública, que busca evaluar a trabajadores con amplia trayectoria en el Estado en contenidos y disciplinas que no están relacionadas con sus tareas; y el cese de los despidos en el sector público, así como la reincorporación de las personas despedidas ilegítimamente.

«Estos despidos evidencian que no solo ajustan la cultura y el Estado sino que intentan disciplinar a sus laburantes, en un año de por sí difícil. En 2024, tuvimos más de 300 despidos que afectaron principalmente programas territoriales y de alcance federal como LATE, apoyos federales y Festivales Argentinos. Tampoco utilizaron todo el presupuesto: hasta mediados de septiembre habían ejecutado solo el 78% «, dijo Nicolás Rodríguez Saa, de ATE Cultura.