Días atrás, Fernández anticipó que la idea del plan es «generar fondos para que la Policía bonaerense se equipe adecuadamente, y un segundo proyecto llamado Centinela 2, que incorpora 4 mil gendarmes al Gran Buenos Aires».
Según informaron fuentes oficiales, el plan incluye una inversión total de más de 10.000 millones de pesos de fondos nacionales a distribuirse entre el Gobierno de la provincia de Buenos Aires y 24 distritos del Conurbano. El porcentaje que irá a la provincia directamente y a los municipios es objeto de negociaciones de última hora, a la vez que dentro del propio Gobierno bonaerense habrá partidas que irán al ministerio de Seguridad y otros fondos al Ministerio de Justicia, destinadas a reformas en el servicio penitenciario.
El plan oficial también incluye mejoras en paradas de colectivos y el establecimiento de los denominados «puntos seguros» en lugares estratégicos del conurbano, donde se invertirá en iluminación y más cámaras de seguridad.
Un total de 4.000 efectivos de fuerzas federales se sumarán a los efectivos de Prefectura y Gendarmería que ya están trabajando en el territorio provincial. Estas fuerzas irán a trabajar a nivel operativo, no a cumplir funciones administrativas. Estarán en el terreno, en operativos específicos.
En los últimos días, desde el Ministerio de Seguridad de la Nación se estuvo realizando un relevamiento de los distintos distritos del conurbano y sus necesidades específicas en materia de seguridad, a la vez que hubo múltiples reuniones entre funcionarios nacionales, provinciales e intendentes. Parte de los recursos irán al Gobierno provincial y parte a los municipios de manera directa.
El 21 de agosto pasado, durante la firma de una serie de convenios para la realización de obras de infraestructura ferroviaria, el Presidente ya había adelantado que estaba trabajando «en una serie de medidas para garantizarles a todos los bonaerenses la seguridad que necesitan».