David Johansen, frontaman de los New York Dolls y único sobreviviente original de la banda pionera del punk rock, murió ayer viernes en su casa de la Gran Manzana.
El músico y actor tenía 75 años y dejó este mundo cruel luego de pelear casi una década contra el cáncer. Hace pocas semanas, Johansen había reveado que luchaba contra un tumor cerebral de grado 4. Pidió ayuda a sus fans para el tratamiento.
Nacido y criado en Nueva York, su obra será recordada como chispa inicial del punk rock a principios de los años setenta. A cuatro manos con el guitarrista Johnny Thunders -fallecido en 1991- grabó trabajos memorables con dosis desparejas de glam, rock salvaje y protopunk como New York Dolls (1973) y Too Much Too Sonn (1974)
Su carrera solista también fue generosa. En los años duros de los ’80 craneó su alter ego Buster Pointdexter y parió el hit inoxidable «Hot Hot Hot». Como actor, se ganó el mango en films como Scrooged, Let It Ride y hasta en la serie División Miami.
En 2004, reunió el rompecabezas y salió de gira nuevamente con los sobevivientes de los New York Dolls. Martin Scorsese filmó en 2020 un show de Johansen en el New York Café Carlyle, materia prima para el documental Personality Crisis: One Night Only, que narra vida y obra del artista. Larga vida al muchacho punk.
