Entre Río Negro y Neuquén, el patagónico, Darío Martínez, nació en la localidad de Ingeniero Huergo, ubicada en el departamento de General Roca. Estudió la carrera de contador público en la Universidad Nacional del Comahue, pero no se graduó.

En 2005 asumió como concejal en Neuquén Capital manteniéndose en el cargo hasta 2013. En el medio, en las elecciones del 2011 fue candidato a intendente de esa ciudad, pero obtuvo el cuarto lugar con el 7% de los votos, ya que el ganador fue Horacio “Pechi” Quiroga, quien falleció el año pasado por problemas pulmonares mientras competía para senador nacional por Juntos por el Cambio.

Martínez desembarcó en el Congreso en el año 2016 cuando asumió como diputado nacional en reemplazo de Nanci Parrilli que había renunciado en ese momento a su banca para asumir como legisladora provincial. Durante sus años en la Cámara ocupó la presidencia de la Comisión de Energía y Combustibles. En tiempos del gobierno de Mauricio Macri, denunció al expresidente en la causa denominada Panamá Papers que investigaba las cuentas offshore no declarados de la familia Macri y sus funcionarios. También, fue un importante contrincante del exministro de Energía, Juan José Aranguren.

En 2019 fue candidato a vicegobernador representando al kirchnerismo neuquino en la fórmula que encabezaba el parlamentario del Mercosur Ramón Rioseco. Pese a haber tenido el respaldo de la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner – que grabó un spot pidiendo el pueblo neuquino el apoyo a los candidatos- fueron derrotados por el actual gobernador de la provincia petrolera, Omar Gutiérrez (Movimiento Popular Neuquino).

Durante la campaña de Alberto Fernández se lo solía encontrar en las oficinas de trabajo que el candidato usaba en la calle México en el barrio de San Telmo. Martínez, de excelente relación con Fernández asesoraba al actual presidente en cuestiones energéticas, sobre todo temas de su expertiz como Vaca Muerta e YPF.

De hecho, en el último tiempo había participado de reuniones en Casa Rosada sobre temas del sector como la producción de petróleo y gas, el barril criollo, el Plan Gas 4, la deuda con las empresas de hidrocarburos. Sobre el tema había señalado: “YPF tiene que volver a ser el motor energético del país” he informado: “Ya estamos trabajando en el nuevo Plan Gas 4, pero si tomamos sólo ese rubro, gracias a la Resolución 46 de Aranguren, YPF perdió 10 puntos en la participación de la producción de gas y en el no convencional cayó 15 puntos y eso no fue magia, fue el mejor equipo de los últimos 50 años”.

El diputado nacional, que además es presidente del Partido Justicialista de su provincia tiene un buen vínculo con Máximo Kirchner. También con la senadora Silvia Sapag, – hija de Felipe Sapag fundador del Movimiento Popular Neuquino y cinco veces gobernador de la provincia- con quien comparte oficina en Neuquén.

Martínez tenía como objetivo trabajar en su candidatura a gobernador de Neuquén de cara a las elecciones 2023. Desde su entorno sostienen que cuenta con imagen positiva y destacan que es un político que se lleva bien con todos los sectores de la provincia porque es de “escuchar mucho todas las voces”.

El ahora secretario de Energía, volvería a disputar la provincia con el Movimiento Popular Neuquino (MPN), que lleva seis décadas consecutivas en el gobierno. “Gutiérrez terminaría su segundo mandato con una imagen diluida, pero si el partido no va a internas o se rompe podría ser difícil concretar el sueño”, sostienen.

En la Cámara Baja, en su reemplazo -su mandato vence en 2023- asumiría Guillermo Carnaghi, que fue ex diputado provincial y ex secretario de gobierno de la municipalidad de San Martín de los Andes, aplicándose así la ley de paridad de género: renuncia varón y asume otro varón.