«Él opina que el kirchnerismo destruyó el país y que los niveles de corrupción fueron muy grandes, pero también lamenta que (el presidente Mauricio) Macri no haya hecho las reformas que tendría que haber impulsado. No puede creer que todavía convivamos con impuestos tan altos y que no haya bajado el gasto público y de la política», explica la candidata a vicepresidente y dirigente evangelista Cynthia Hotton, cuando este diario le pregunta sobre la relación que mantiene con el propagandista ultraconservador Steve Bannon, que fue estratega del presidente de los Estados Unidos, Donald Trump. Bannon actualmente asesora a distintos partidos de ultraderecha europeos, como Vox de España, Fidesz de Hungría y Alternativa para Alemania. Según el «gurú», el actual presidente de Brasil y excapitán de Ejército, Jair Bolsonario, es «el líder más poderoso en el escenario mundial, después del actual vicepremier italiano, Matteo Salvini, líder del partido de extrema derecha, Liga Norte y de NOS, «Nosotros con Salvini».
La Argentina no está afuera del radar de Bannon, que salió de la oscuridad de la derecha estadounidense cuando Trump le agradeció sus consejos de campaña y lo puso como su estratega en la Casa Blanca. Hotton es diplomática de carrera, se desempeña hace casi cuatro años como colaboradora de la actual embajadora ante la OEA, Paula Bertol. Para estas elecciones, Hotton es candidata a vicepresidenta del Frente NOS y del Partido Valores Para Mi País, que lleva como candidato a presidente al veterano de la Guerra de Malvinas, excarapintada y extitular de la Aduana, Juan José Gómez Centurión.
En diálogo con Tiempo, Hotton reconoce la relación que tiene con Bannon, a quien conoció en Washington, durante las funciones como diplomática que mantiene, a pesar de continuar como candidata a vicepresidenta de un exfuncionario de Macri, que también trabajó para el líder del PRO en la Ciudad de Buenos Aires. «Yo estoy viviendo en Washington por mis funciones», explica, pero «como siempre estuve a favor de la vida, fui conociendo distintas ONG. También me congrego en una Iglesia, donde lo conocen a Bannon, y cuando les conté a algunos de mis amigos allá que iba a presentarme con mi partido, me pusieron en contacto con él», cuenta la dirigente evangélica, que mantiene una activa militancia contra el aborto, la sanción del proyecto de Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo y la aplicación de la norma de Educación Sexual Integral.
El pastor que celebró desde Washington la candidatura de Hotton, según confirmó a este diario la precandidata, es David Platt, expresidente de la Junta de Misiones Internacionales de los Bautistas del Sur (JMI) y actual pastor de la Iglesia Bíblica McLean en Virginia. «Es el pastor que rezó por Trump hace poco, y fue visitado por Trump tiempo después. Gracias a él pude conocer a Bannon», detalla la dirigente.
En Buenos Aires, y especialmente dentro del Palacio San Martín, distintas fuentes oficiales advierten que las citas habrían sido más y que implicaron aportes económicos a la campaña del Frente NOS.
«Recibí aportes de una fundación que está a favor de la vida, que quiere acompañar esta campaña. Es una fundación provida de Estados Unidos», contesta la exdiputada, aunque omite identificar su nombre. Si bien no la desvincula de la relación que cultiva con Bannon, Hotton se muestra cautelosa para hablar sobre el pensamiento de Trump acerca de la Argentina. «Soy diplomática y no me meto en las declaraciones del presidente, pero le puedo decir que con Bannon hablamos de la defensa de los valores y el tema de la vida. Coincidimos en que hay agendas con ideología de género que vienen del ámbito internacional y tratan de limitar las posiciones de las culturas propias de cada país», explica la economista.
Para Hotton, el mayor ejemplo de esa influencia «externa» es «el tema del aborto». «Viene muy digitado desde afuera de nuestro país, donde la mayoría está a favor de la vida», confió la diplomática para reflejar las coincidencias que mantiene con Bannon. «Me contó el trabajo que está haciendo en distintos países de Europa, donde conoce los matices de cada uno», dijo, y explicó que incluyó a su partido dentro de ese abanico ideológico.
Para la compañera de fórmula de Gómez Centurión, la misión electoral que tiene por delante «es representar los valores de los argentinos que se levantan todos los días a trabajar, que educan a sus hijos y que no tienen famosos que hagan lobby por ellos». La diplomática está convencida de que «hay un espacio vacante, si no miremos a Cambiemos. Ellos dijeron que eran la nueva política y al final pusieron a Pichetto de vice», señaló. Para la dirigente evangélica su partido «será una gran sorpresa en estas elecciones por su crecimiento vertiginoso». Basada en esa certeza, evita anticiparse respecto a su posición en un eventual balotaje. «Apuntamos a las PASO y en la primera vuelta buscamos el apoyo de los argentinos que piensan como nosotros. Si hay balotaje, veremos, pero lo que tenemos claro es la consigna: ‘Si vas con el aborto, no te voto’. Ese será nuestro objetivo, que en la segunda vuelta haya un candidato que no apoye el aborto y que se comprometa a vetarlo si se transforma en ley. Eso es lo que ven nuestros votantes». «