Kim Jong-un llegó a la estación de Dong Dang luego de una travesía de 60 horas en su tren blindado a través de territorio chino. Luego viajó en un Mercedes S600 Pullman a la capital vietnamita. Donald Trump bajó del avión presidencial Air Force One directamente en Hanoi y celebró en su cuenta de Twitter la recepción de las autoridades de la nación del sudeste asiático.
El segundo encuentro cumbre entre los líderes de Estados Unidos y Corea del Norte despertó expectativas, alentadas por el polémico empresario, de que finalmente se firmará un acuerdo de paz luego de 65 años de finalizada la contienda y que había finalizado con un precario armisticio firmado en 1953. Lo más importante, según el ocupante de la Casa Blanca, sería firmar un tratado de desnuclearización, con lo que Washington levantaría las sanciones comerciales y permitiría así una «lluvia de inversiones» en el norte de esa península asiática.
«Me dirijo a Vietnam para mi reunión con Kim Jong un. ¡ Esperamos una cumbre muy productiva!»
Heading over to Vietnam for my meeting with Kim Jong Un. Looking forward to a very productive Summit!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) 25 de febrero de 2019
…había dicho Trump al subirse a la aeronave
«Acabo de llegar a Vietnam. Gracias a todas las personas por la gran recepción en Hanoi. Enormes multitudes, y tanto amor!»
Just arrived in Vietnam. Thank you to all of the people for the great reception in Hanoi. Tremendous crowds, and so much love!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) 26 de febrero de 2019
…dijo al llegar.
La cumbre, que se desarrollará en el hotel Sofitel Legend Metropole, de Hanói, fue preparada con poca antelación, dijeron las autoridades vietnamitas. «Tuvimos apenas 10 días, cuando en Singapur -donde ese hizo el primer encuentro, en junio del año pasado- tuvieron como dos meses». Una muestra de la preocupación por cualquier incidente que opaque el encuentro que podría significar la paz definitiva en esa parte del mundo y lllevaría, sin dudas, a cambiar la economía norcoreana definitivamente.
Los analistas de medios occidentales se demoraron en explicaciones sobre las posibles razones de Kim para viajar en tren durante casi tres días para recorrer más de 4000 kilómetros. Algunos atribuían la decisión a tradiciones aún vigentes en esa nación desde que el ferrocarril era el medio preferido del abuelo de Kim, el fundador de la dinastía, Kim Il Sung, porque le temía a los aviones. Aprovechan esta explicación para contar que este tercer Kim hizo una suerte e de purga entre sus funcionarios hace algunas semanas, cuando ya estaba definido el nuevo encuentro con Trump.
Si bien la información que proviene de Piongyang se basa usualmente en trascendidos con poca posibilidad de ser verificados, fuentes surcoreanas aseguran tener certezas de que Kim III hizo detener o ejecutar a unas 70 funcionarios y dirigentes a los que acusó de actos de corrupción.
El dato es que muchos de esos exonerados fueron críticos de las concesiones de que acusan a Kim para lograr un acercamiento a Estados Unidos. Es que, se sabe, negociar quiere decir precisamente conceder para obtener algo a cambio. Y los halcones de la política no suelen hablar ese idioma.
Algo parecido le pasó a Trump al volver de Singapur. Recibió furibundas críticas de funcionarios del departamento de Estado pero también de los medios de comunicación y de dirigentes del Partido Demócrata, que lo acusaron de haberse reunido con un dictador y de con esa cumbre no hizo sino legitimar un régimen comunista.
Podrían marcarle también la contradicción de que mientras le dio la mano a Kim Jong-un, que reivindica una vía coreana al socialismo, en América Latina mete presión y amenaza con invasiones a gobiernos como el de Venezuela, el de Nicaragua y el de Cuba.
«Ahora todos pueden sentirse mucho más seguros que el día en que asumí el cargo. Ya no hay una amenaza nuclear de Corea del Norte», había dicho Trump el año pasado. Ahora especuló que el deseo de negociar de Pionyang obedece a que Kim «se da cuenta, quizás mejor que nadie, de que sin armas nucleares, su país podría convertirse rápidamente en una de las grandes potencias económicas de cualquier parte del mundo. Debido a su ubicación y su gente (y él), tiene más potencial para un crecimiento rápido que cualquier otra nación! «.