El día de Cristina Castro hoy debería haber sido diferente. “Estoy acostumbrada a perseguirlos a mis niños en los cumpleaños. Estén donde estén, los voy a visitar. Esta vez va a ser muy difícil. El flaco cumple 23 y no va a estar”. El flaco es Facundo Astudillo Castro y quien habla es su mamá, que asegura que llegará hasta las últimas consecuencias con tal de saber qué pasó con su hijo, desaparecido hace casi cuatro meses.
Una semana atrás e encontraron restos de un esqueleto humano en la zona de Villarino Viejo, en la afueras de Bahía Blanca, que aún no fueron identificados. Sin embargo, los investigadores suspendieron la búsqueda del joven desaparecido desde el 30 de abril y la propia Cristina no tiene dudas de que se trata de Facundo, sobre todo por el hallazgo de una de las zapatillas en el lugar.
–¿Cree que está más cerca de conocer la verdad?
–Sé que estamos cerca de saber la verdad de lo que pasó con Facundo. Nos quieren mentir de mil formas. Primero, desde Villarino impusieron desde la intendencia que había que investigar el narcotráfico, porque mi hijo había desaparecido por eso. Los testimonios de diferentes personas, incluido Marcelo González (el ex cuñado de Facundo), fueron claros al decir que la policía los fue a apretar para decir que Facundo estaba metido con narcotraficantes en Bahía Blanca, y que por eso lo desaparecieron.
–Fue una de las teorías que se intentó imponer, pero no la única…
–Ahora resulta que fue un accidente, supuestamente. Están diciendo que Facundo tuvo un accidente y se cayó, y yo les voy a seguir diciendo lo mismo: lo único que falta es que digan que se suicidó, como dicen de tantos chicos que ingresaron a comisarías y que se suicidaron. Parece que está de moda, pero a los pibes los suicida la policía.
–La semana que viene empezarán las pericias al cuerpo, que por el momento no fue identificado. ¿Usted sigue pensando que se trata de su hijo?
–Sí, sigo manteniendo que se trata de él. De todas formas, hay que esperar la autopsia. Sigo diciendo que es mi hijo y que ese cuerpo lo han llevado hasta allá y que lo han plantado en ese lugar. Me faltan todas las pertenencias de mi hijo: él salió con una mochila y de esa mochila lo único que está es la sandía con la vaquita de San Antonio que le regaló mi mamá. Después, no hay documentación, no hemos encontrado el celular, ni la ropa de Facu, ni ninguna de las cosas que lleva en su mochila.
–¿Confía en las pericias que se van a realizar a partir de la semana que viene?
–Confío en el Equipo Argentino de Antropología Forense y confío en nuestra perito de parte, Emma Virginia Creimer, que es una excelente persona. Yo siempre les pido que a mí no me mientan, porque detesto muchísimo que pase eso, y esta señora ha sido muy cruda conmigo. Me ha ido diciendo los pasos a seguir, y prefiero que sean así de crudos y directos antes de que me estén mintiendo.
–¿A qué se refiere con que fue cruda?
–Me dijo que le llamaba mucho la atención que el cuerpo estuviera tan deteriorado.
La voz de Creimer será tenida en cuenta en el expediente, pero no fue fácil que los investigadores escucharan los aportes de la querella, a cargo de los abogados Leandro Aparicio y Luciano Peretto, que representan a Cristina, y de los diferentes especialistas que presentaron en la causa, que empezó allá a principios de junio como “búsqueda de paradero” en la justicia ordinaria, y luego pasó al fuero federal, para que se trate el caso como una “desaparición forzada”.
–¿Se sintió destratada por los investigadores?
–Haciendo un breve repaso, desde el mismo momento en que me presento a hacer la denuncia acá en Pedro Luro, me dijeron que no necesitaba un abogado. Me estuvieron boludeando un montón de días. Cuando Peretto, mi abogado, se presentó, insistían en que no lo necesitaba, mientras tanto ellos se cubrían y tapaban las evidencias. Después de tantas mentiras, el fiscal (Ariel Antonio) García Dimas, al que nunca le vimos la cara, nos pidió que testificaran los tres testigos que habían visto a Facundo subirse al patrullero. En ese momento, dijo que se iba a declarar incompetente, y no fue así: siguió la causa por averiguación de paradero.
–¿Desde el sector político tampoco la ayudaron?
–Nos ha tocado luchar contra un intendente (Carlos Bevilacqua) que en ningún momento dio la cara ni se acercó a mi casa. Solamente pidió mi número de teléfono cuando estaba viniendo (el ministro de Seguridad bonaerense Sergio) Berni, y después de eso le pidió a toda su gente del municipio, amenazándolos con perder su trabajo, que no posteen nada de la búsqueda de Facu porque estábamos estropeando su gestión. No permitió que nadie del municipio se sumara a las marchas, porque los amenazaba con su trabajo. Ahora, nos enfrentamos a un fiscal (Santiago Ulpiano Martínez) que, teniendo tantas pruebas, hace las cosas mal y quiere desviar la investigación. Es muchísima la lucha nuestra, pero sé qué la vamos a ganar, sé que los culpables van a ir presos.
–¿Sus vecinos temen represalias?
–Yo no puedo decir absolutamente nada de mis vecinos. Han salido a la par mía a reclamar. Yo no me puedo quejar del pueblo de Villarino, que aún teniendo al intendente en contra, se ha parado para decir: “Esto no es así, somos laburantes y los laburantes saben que plata y miedo no tenemos”.
–¿Sigue pensando que Berni encubre a los sospechosos?
–Él desmintió lo que yo dije, pero esa noche yo estaba ahí. No me lo cuenta nadie. Vi cuando uno de los empleados del fiscal le acerca el teléfono. Vi que del otro lado de la línea era el señor Berni que ya se estaba presentando en todos los canales de televisión, porque él tiene esa posibilidad, y diciendo descaradamente, sin que siquiera nosotros pudiéramos haber visto el cuerpo, que se trataba de mi hijo. En ese momento solamente lo había visto una persona el cuerpo. Además, el señor Berni aseguró que había una mochila enterrada, que hasta el día de hoy sigue sin aparecer. Quién le habrá dicho eso a Berni, no lo sé, pero que está mintiendo, está mintiendo.
–¿Siente que peligra la investigación?
–Ellos no tendrían que estar hablando entre sí. Así de sucia está la justicia en la Argentina, plagada de fiscales que no atienden a las víctimas y que no hacen las cosas como tienen que hacerlas para desviar las investigaciones. Lo único que falta que digan es que mi hijo se suicidó. Y estoy preparada para eso. Y se la voy a salir a pelear al fiscal, a Berni y a quien sea.
–Los dirigentes políticos y funcionarios judiciales no la ayudaron, ¿ha hablado con familiares de víctimas?
–He tenido dialogo con familiares de todas las víctimas de desaparecidos, con esas mamás que en democracia han levantado a sus hijos de la calle y llevado a una comisaría y se los entregaron suicidados. En esto que estoy viviendo, fue clave la solidaridad de los otros. No pensé que hubiera tanta mugre en la policía, ni en la justicia o en todo el sistema. Los familiares me han advertido: “Te va a pasar esto y esto otro”, y así fue. Hasta me han llamado familiares de desaparecidos cuyos hijos nunca aparecieron y me dijeron: “Vos rompiste mucho las pelotas, por eso es que te están devolviendo el cuerpo de tu hijo”. Yo no sé si rompí las pelotas o no, pero si tengo que dar vuelta al mundo para saber la verdad y que los culpables estén presos, lo voy a poner patas para arriba.
Cómo será la autopsia que realizará el EAAF
A partir de las 9 del próximo martes, comenzará a practicarse la autopsia a los restos encontrados el sábado 15 de agosto en Villarino Viejo. La necropsia se llevará adelante en la sede del Equipo Argentino Antropológico Forense, en la ex Esma, y de la misma participará un conjunto interdisciplinario de peritos del EAAF y del Cuerpo Médico Forense de la Suprema Corte de Justicia, además de especialistas del Conicet y de distintas universidades nacionales.
Para esta diligencia, ya se tomaron muestras de ADN del padre biológico de Facundo. Además, el EAAF estuvo presente en la escena del hallazgo, donde levantó muestras del medioambiente que serán cotejadas con lo que surja del análisis del cuerpo, para determinar, en la medida de lo posible, si fue «plantado», como sospecha la querella, o no.
Por otro lado, la Subsecretaría de Investigación Criminal y Cooperación Judicial del Ministerio de Seguridad de la Nación “solicitó copia completa de la causa, con el objeto de realizar una evaluación integral y sugerir medidas de acción”, indicaron en un comunicado desde la fiscalía que conduce Santiago Ulpiano Martínez, en el que se aclara que “la solicitud fue realizada en el marco de las atribuciones conferidas a esa cartera ministerial, en cumplimiento de las obligaciones internacionales del Estado Argentino en materia de Derechos Humanos”.
La Policía Federal Argentina, por su parte, remitió 31 DVDs con los datos extraídos de los teléfonos secuestrados a los sospechosos: los efectivos policiales de las seccionales de Mayor Buratovich y Teniente Origone, quienes tuvieron contacto por última vez con el joven.
Los escabrosos antecedentes del fiscal Martínez
La figura del fiscal federal Santiago Ulpiano Martínez es resistida desde distintos ámbitos, sobre todo por los organismos de Derechos Humanos. El CELS, por caso, impugnó su terna como fiscal de Bahía Blanca por sus antecedentes en el juzgado federal de esa misma jurisdicción, en donde tenía detenidos sin el debido proceso y elementos de prueba como estupefacientes y armas sin documentar. Pero lo más escabroso es su comportamiento ante las causas de lesa humanidad: sus intervenciones obstaculizaron, entorpecieron y frenaron la investigación de ese tipo de crímenes.
Martínez se convirtió en funcionario judicial en 1981 e hizo gran parte de su carrera estando bajo la tutela del ex juez federal de Bahía Blanca Luis Balaguer, quien luego caería preso por estafas y falsificación de documentos.
El fiscal federal también es y será recordado por haber impedido una década atrás la extradición del torturador y criminal Alfredo Astiz a Francia, para que rindiera cuentas por las desapariciones de las monjas Leónie Duquet y Alice Domon.
La vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, entonces presidenta de la Nación, criticó en 2010 al funcionario judicial en las redes sociales por su actitud frente a los represores y también por haber favorecido al Grupo Clarín cuando el holding judicializó la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual.
Los abogados de Cristina Castro recusaron a Martínez en dos oportunidades. Por el momento, la jueza Gabriela Marrón convalida su actuación y lo mantiene al frente de la investigación.
Con Alberto Fernández
Cristina Castro viajará a Buenos Aires y se reunirá este lunes 24 de agosto al mediodía con el presidente Alberto Fernández, con quien ya mantuvo al menos dos conversaciones telefónicas. La madre de Facundo será recibida por el mandatario en la residencia de Olivos. Cristina ya había comentado que el mandatario le había dicho: “No te quiero molestar, pero quiero que sepas que estoy para lo que necesites, si necesitás venir para Buenos Aires, estoy para apoyarte, quiero que sepas que estoy”. La mujer se quedará en Buenos Aires para seguir de cerca la autopsia de los restos encontrados hace una semana.