Pueden cambiar las formas y las palabras, pero un sector importante de la sociedad ya detectó que, tanto en la Ciudad de Buenos Aires como a nivel nacional, existe un modelo similar del país, para algunos casi idéntico. Mientras el presidente Javier Milei insiste con la desaparición del Estado, acción que lleva adelante con el desfinanciamiento y despidos en todos los sectores. el actual jefe de gobierno, Jorge Macri, evita hacer referencia a esa premisa libertaria, pero en la práctica misma y de manera gradual transfiere fondos del sector público al privado.

Durante la jornada, el ex intendente de Vicente López presentó oficialmente los ‘vouchers educativos’, para aquellas personas que envían a sus hijos a escuelas de gestión privada. Desde el Ejecutivo local reconocieron que esta ayuda también es para los colegios donde la administración porteña se hará cargo de la mitad de la cuota. En paralelo, día a día se profundiza la crisis edilicia en escuelas públicas de la Ciudad, con falta de mantenimiento y peligro en la infraestructura escolar de cientos de edificios educativos (ver recuadro).

El mandatario PRO, en conferencia de prensa, detalló los fundamentos de esta iniciativa que tiene como fin pagarle a las escuelas privadas el 50% del abono mensual: “Vamos a asistir a las familias pero también a las escuelas. Y haremos todo lo que esté a nuestro alcance para que ninguna cierre. Cada escuela que cierra es una herida que queda en el barrio, en la historia, en los niños y las familias que se educaron”, argumentó.

El Jefe de Gobierno estuvo acompañado por su vice Clara Muzzio; el Jefe de Gabinete, Néstor Grindetti; y la ministra de Educación, Mercedes Miguel, entre otros referentes y funcionarios políticos.

Desde el Ejecutivo, aseguran que esta iniciativa es para garantizar que todos los chicos tengan las mismas oportunidades de aprender y evitar que cierren escuelas, cubrirá parte de la cuota de los alumnos que van a establecimientos de gestión privada subvencionados. El beneficio, llamado “Ayuda cuota escolar”, se extenderá durante tres meses (a partir de mayo) y alcanzará hasta el 50% de la cuota con un tope mensual por cada hijo de $ 30.000.

El Jefe de Gobierno sintetizó que su tarea “no es describir el momento, es tomar decisiones en función de lo que va ocurriendo. Y sabemos que hoy hay muchas familias que no pueden pagar la escuela que eligieron para sus hijos. Nuestra mirada es que nos importan todos los chicos que estudian en la Ciudad de Buenos Aires. Aquellos que van al sistema de gestión público-público, pero también aquellos que asisten al sistema de educación público de gestión privada”.

Crisis edilicia y escuelas públicas inseguras

En el barrio de Saavedra hay dos escuelas que sintetizan el abandono por el que atraviesan los edificios escolares en la Ciudad de Buenos Aires, una situación que arrastran desde hace años y que incluyen: deterioro edilicio, precariedad en el tendido eléctrico y filtraciones de agua.

Desde la lluvias ocurridas a inicios de marzo, tanto la Escuela Primaria 15 como el Jardín N° 5 DE 10 Pablo Picasso, están sin servicio eléctrico. Ambos establecimientos educativos ocupan el mismo edificio situado en la calle Pico y Vidal del barrio de Saavedra. Las docentes tienen que dar clases con linternas encendidas y aprovechando la poca luz del sol que ingresa por las ventanas. La situación se suma a los robos que recibieron en este último tiempo: tres en un año.

Se calcula que por problemas de infraestructura se perdieron más de 33.000 horas de clases en escuelas públicas porteñas. Este relevamiento, realizado por la CyMAT, fue publicado en julio del año pasado en este medio; y la cifra resulta de la suma de horas sin clases de todos los grados, cursos y modalidades de todos los niveles educativos. Entre las problemáticas: falta de gas, carencia de ventilación e invasión de ratas.