Ataques personales y políticos predominaron en el segundo debate de dos horas entre las candidatas y el candidato a la presidencia de México, destinado inicialmente a tratar temas económicos, pobreza y cambio climático.
Claudia Sheinbaum, abanderada por la coalición oficialista que encabeza el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), adelantó que esperaba «calumnias y ataques», pero sostuvo que el proyecto gobernante se impondrá: «La transformación representa primero los pobres, acabar con la corrupción, el Gobierno de López Obrador fue el primero en bajar la pobreza».
La representante del opositor Frente Amplio Fuerza y Corazón por México, Xóchitl Gálvez, afirmó que Morena abandonó a los ciudadanos «al no combatir la delincuencia, uno de los principales problemas es la extorsión», ante lo cual promete aplicar la ley contra el crimen organizado.
Sheinbaum replicó: «hace seis años, con la llegada de la Cuarta Transformación [como se denomina el proyecto oficialista], cambió el modelo del neoliberalismo y la corrupción por la austeridad republicana y el humanismo mexicano», al tiempo que llamó a la construcción del denominado «segundo piso de la transformación», que encabeza el gobernante Morena.
Gálvez, que usó el mote de «narcocandidata» varias veces para referirse a la candidata oficialista, preguntó a Sheinbaum si investigaría a los hijos del presidente López Obrador —quienes han recibido señalamientos por presuntos actos de corrupción— y a responsables de las grandes obras de infraestructura, como el Tren Maya, por presuntas acusaciones de tráfico de influencias.
«No creo que valga la pena [responder], que presente su denuncia», reviró enseguida la candidata oficialista, que se refiere a la «candidata corrupta del PRIAN», por los partidos Acción Nacional y Revolucionario Institucional, sin mencionar al de la Revolución Democrática (centroizquierda).
Xóchitl Gálvez dijo sin pruebas que una empresa de Claudia Sheinbaum, a quien llamó «candidata de las mentiras», recibió dinero de financiamientos en la pandemia y que su madre tenía cuentas en paraísos fiscales.
La candidata de Morena replicó que Gálvez se había servido del poder público mientras fue parte del Gobierno de Vicente Fox (2000-2006) y en la alcaldía de Miguel Hidalgo, a la que encabezó en la capital mexicana.
Jorge Álvarez Máynez, de Movimiento Ciudadano (MC) lamentó que las candidatas no se refirieran a las preguntas del debate y aseguró que no hay fondos públicos para hacer realidad las propuestas de sus adversarias. Sin embargo, afirmó que sus proyectos recibirán financiación: «Es necesaria una reforma fiscal», algo que las otras candidatas no lo han hecho, criticó.
Todas las encuestas otorgan una amplia ventaja en las preferencias de voto a Sheinbaum, exjefa de Gobierno de la Ciudad de México y aliada cercana a López Obrador. De hecho, la consultora Mitofsky la coloca con el 58,8% de las preferencias electorales, mientras que a Gálvez la posicionan con 30,5% y a Álvarez Máynez con 10,6%.