A una semana de una nueva movilización universitaria, que se espera multitudinaria como la de abril y estará acompañada de otro paro docente, el Ministerio de Capital Humano –conducido por Sandra Pettovello- difundió que “el diálogo con las universidades nunca se ha interrumpido desde el inicio de la actual gestión”, pero que “las medidas de fuerza y movilizaciones no alimentan ese intercambio”.

Según Capital Humano, “además del incremento de los gastos de funcionamiento en un 270%, hubo una atención especial referida a los insumos y dinámicas específicas que suponen los hospitales universitarios, que, por pedido de las universidades recibieron más de 49 mil millones de pesos adicionales sobre el aumento de esa línea presupuestaria para 2024. En el caso específico de la UBA, del cual depende el Hospital de Clínicas, las transferencias representan el 94,8% de ese pedido adicional”.

Sin embargo, en el abrazo masivo al Hospital de Clínicas que tuvo lugar este martes, tanto el director como trabajadores dieron cuenta de situaciones laborales y salariales preocupantes. Al punto de “no poder comprar insumos básicos” y tener que suspender intervenciones.

“Las reuniones con gremios y rectores, que se desarrollan con regularidad, son muestra del compromiso del gobierno que han significado un aumento del 76,1% en la pauta salarial. Seguimos, como el primer día, en diálogo tanto con rectores como gremios universitarios. Creemos en ello y señalamos que las medidas de fuerza y movilizaciones no alimentan ese intercambio”, planteó la cartera de Pettovello.

Pese a esas afirmaciones, rectores de universidades públicas nacionales denuncian que no hubo respuestas del Gobierno Nacional a los reclamos salariales planteados desde abril. Este jueves, en tanto, se realiza un paro convocado por gremios docentes y no docentes.

“Un tortuoso 2024”

En las últimas horas, convocaron a una reunión del Consejo Interuniversitario Nacional (CIN) para anunciar una nueva Marcha Federal Universitaria. Víctor Moriñigo, presidente del organismo, expresó: “El Consejo de Rectores va a acompañar y adherir a la marcha del 2 de octubre a las 17 al Congreso. Esta marcha es en defensa de la educación pública, en defensa de la universidad pública argentina, y fruto de un tortuoso 2024. Hemos vivido con mucha angustia a la hora de gestionar las universidades. Esta marcha va a ser en función de solicitar la promulgación de la ley de financiamiento universitario. Si tenemos de aquí al 2 de octubre un veto del Presidente, esta marcha le va a solicitar a los diputados nacionales que puedan acompañar la ley de financiamiento universitario”.

“Para nosotros no es cómodo andar realizando protestas, marchas y expresando nuestro descontento, pero entendemos desde el Consejo de Rectores que es momento de acompañar a nuestros trabajadores que tienen un retraso de 50 puntos contra la inflación, que además están discriminados y tienen 20% por debajo sus salarios con respecto a los trabajadores del Estado, y a acompañar a los estudiantes”, dijo el presidente del CIN. Y agregó: “Ya vivimos esto hace cinco meses, parece una película. Aquel 23 de abril, la sociedad nos acompañó en defensa de la universidad. Cuando dimensionaron el impacto de la marcha, por supuesto, nos convocaron y nosotros nos prestamos al diálogo días después y pudimos resolver el tema de gastos de funcionamiento para las universidades nacionales que lo estamos cobrando en cuotas al día de hoy. Pero en estos meses que pasaron la situación salarial no ha tenido la misma suerte. Nosotros estábamos convencidos que la paritaria nacional iba a llevar a que hubiera un entendimiento y esto no ha pasado. Llevamos diez meses con cifras muy complicadas y eso atenta enormemente con la calidad de nuestras instituciones”.