Una campaña con roles diferenciados, actos por separado y actividades conjuntas. Con un candidato a presidente que recorrerá el país y que tendrá que cargarse sobre las espaldas el desafío de representar una coalición ancha, heterogénea, con una diversidad no exenta de tensiones, pero unida por una inmensa vocación por ganar. Una candidata a vicepresidenta que hará su aporte a partir de un formato novedoso para tiempos proselitistas: el reportaje público con un escritor consagrado y el diálogo de a dos frente a un auditorio para presentar un libro. Un tercer protagonista que, dado el objetivo central, adquirió una centralidad inesperada aunque comprensible. Su contribución, lo admiten incluso quienes no simpatizan mucho con él, puede hacer la diferencia para un triunfo en primera vuelta.
Por imposición de las circunstancias, el Frente de Todos se encuentra en las puertas de una campaña atípica. Alberto Fernández, Cristina Fernández de Kirchner y Sergio Massa serán los tres protagonistas claves –no los únicos, porque también tendrá un rol importante Axel Kicillof- en la pelea por conquistar la adhesión, la empatía emocional y finalmente el voto de las argentinas y los argentinos. Los tres saben que tal desafío, tras cuatro años de macrismo, no será sólo una cuestión meramente argumentativa.
“En una campaña electoral nadie vota al que mejor argumenta sino al que mejor le cae. Ya que la política no es el contraste de opciones ideológicas objetivamente expuestas y racionalmente debatidas, sino una forma de comunicación más emparentada con la dramaturgia, con aquella puesta en escena que mejor logre capturar los miedos y las esperanzas de la mayor parte de la ciudadanía en un momento histórico”, escribió alguna vez el intelectual norteamericano Murray Edelman, al que muchos consideran el verdadero pionero de las estrategias de comunicación y asesoramiento político que hoy se asocian al ecuatoriano Jaime Durán Barba.
Alberto, Cristina y Sergio son tres dirigentes de peso. Estuvieron públicamente enfrentados –sobre todo CFK versus Alberto y Sergio- y juntos representan buena parte de la diversidad del arco político, social y sindical que encontró su instrumento electoral en el Frente de Todos. La singularidad de la campaña del frente del espacio nacional-popular es que, a diferencia de la coalición oficialista Juntos por el Cambio (ex Cambiemos), el Frente de Todos tendrá tres protagonistas importantes en el objetivo común de ganar las elecciones. El macrismo, por el contrario, pondrá sobre el terreno a dos actores centrales: María Eugenia Vidal y el propio Macri.
Este protagonismo más repartido, hasta se podría arriesgar casi coral, permitirá que el conglomerado compuesto por el PJ, Unidad Ciudadana, el Frente Renovador y el arco de alrededor de 18 partidos políticos que adhiere a la alianza se despliegue en una campaña con actividades simultáneas en distintas partes de la Argentina.
Una primera muestra de eso se vive este jueves 20 de junio, Día de la Bandera, feriado por el aniversario de la muerte de Manuel Belgrano. Mientras que Alberto Fernández fue a San Juan, donde presenció el desfile cívico-militar en el departamento de Chimbas, compartió un desayuno con el gobernador –recientemente reelecto- Sergio Uñac y brindó una conferencia de prensa para medios locales, CFK se presenta en Rosario para ofrecer otra charla abierta sobre su último y exitoso libro, Sinceramente. Cristina volverá a estar acompañada por el escritor Marcelo Figueras, autor de varias novelas y de la biografía del Indio Solari, Recuerdos que mienten un poco. El formato cuasi literario de las apariciones de Cristina seguirá en lo que resta de junio. Según pudo saber Tiempo, la tercera presentación de la senadora y candidata a vicepresidenta será en Resistencia, provincia de Chaco, donde la acompañará el intendente anfitrión, Jorge Capitanich. La visita de CFK a la provincia del noreste está programada para el jueves 27 o el viernes 28. Después de ese viaje la ex presidenta volará a La Habana para reencontrarse con su hija Florencia.
De los tres actores centrales de la campaña, Massa es el que –por ahora- mantendrá un perfil un poco más bajo. Tras anunciar que competirá por el Frente de Todos desde la primera candidatura a diputado nacional por la provincia de Buenos Aires, el tigrense está abocado al 100% en la negociación por espacios para legisladores nacionales, legisladores provinciales, candidatos a intendentes y a concejales de su sector político. Su intención, confirmaron a este diario sus colaboradores más cercanos, es seguir bien en detalle todo este proceso hasta la medianoche del sábado próximo, 22 de junio. A partir de entonces, confiaron a Tiempo, Massa volcará su figura y su discurso para recorrer la provincia de Buenos Aires pero también aquellos distritos (¿Chubut, Salta?) en los que el Frente Renovador tuvo históricamente un fuerte arraigo electoral.