Mauricio Macri no modifica la postura asumida desde principio de año y mantiene clausurado el Congreso de la Nación mientras pone todas sus energías en las marchas del #SiSePuede para consolidar su voto duro y garantizar cierta competitividad para el 2021.
La ley de góndolas fue una de las menciones centrales en el proyecto Argentina contra el hambre que presentó el candidato presidencial Alberto Fernández (Frente de Todos). La norma contó a principio de año con el impulso público de la ultra macrista Elisa Carrió y del opositor Juan Cabandié obtuvo dictamen de un plenario de Comisiones el 21 de mayo. Pese a eso, nunca llegó al recinto.
El proyecto de ley cuenta con prioridad para ser tratado debido a que fue votado el tratamiento con preferencia por unanimidad en la sesión que se llevó a cabo el 24 de abril. Claro que para que se pueda tratar tiene que ser convocada por el Presidente de la Cámara Emilio Monzó una sesión ordinaria, algo que sucedió una sola vez en lo que va del año y que por expresa instrucción del Jefe de Gabinete, Marcos Peña, no sucederá por lo menos hasta las elecciones de octubre.
En 2019 la Cámara de Diputados sesionó seis veces pero sólo una de ellas fue para una sesión ordinaria. El resto de la sesiones se dividieron entre especiales con temario acotado y un informe de gestión.
Más allá de la decisión política, la coyuntura y el clima de fin de ciclo, la norma está en condiciones de ser abordada por los diputados en el recinto. El trabajo en comisiones terminó con dos dictámenes, uno de la oposición y otro del oficialismo.