No debe resultar sencillo para Baltasar Comotto despegarse de la imagen de guitarrista explosivo que se construyó en torno a él, sobre todo si ese concepto se origina en la manera en que lo describieron dos indiscutibles del rock argentino como Luis Alberto Spinetta y Carlos “El Indio” Solari, cuando contaron con sus servicios en las seis cuerdas en distintos momentos de sus respectivas trayectorias.

Sin embargo, el músico de extrema popularidad por su labor en Los Fundamentalistas del Aire Acondicionado lo viene intentando desde sus producciones solistas, a partir de una búsqueda sonora que reivindica y refuerza en El exilio del jaguar, su flamante disco, que viene presentando en shows por todo el país, acompañado por el ex Catupecu Machu Macabre, con quien armó una interesante sociedad.

“Estamos en un formato de dúo con Macabre que está buenísimo. Ya tocamos tres fechas, en San Antonio de Areco, La Plata y Rosario, con muy buena repercusión. El show es muy compacto porque es una mezcla de música electrónica con rock. También estoy saliendo un poco del estricto rol de guitarrista, dejando un poco de lado la viola y saliendo a cantar, que está bueno y es algo novedoso para la carrera que estoy haciendo”, se entusiasma Comotto en diálogo con Tiempo.

Avanzada la conversación, el artista, que también acompañó a Andrés Calamaro en la etapa del disco Bohemio, recalcará esta intención de desmarcarse de los motes de “guitarrista atómico” y “guitarrista pornográfico” impuestos por Spinetta y El Indio, respectivamente, aunque reconocerá que en su caso “por momentos llegué a sentirme preso de la guitarra”.

Comotto en acción.

Pero si a alguien le quedan dudas del camino que pretende transitar basta con prestar atención a su nueva producción, que continúa una línea trazada en su anterior álbum Empezó la cacería, de 2022, en donde surgió la actual alianza musical con Macabre.

El nuevo trabajo es la quinta producción de Comotto tras su debut de 2008 con Rojo; Blindado, de 2011 que le valió un Premio Gardel como “mejor nuevo artista de rock”; Élite, con el que en 2018 volvió a alzar la estatuilla en la categoría “mejor álbum de rock pesado/punk”, y el mencionado Empezó la cacería.

“Armamos un dúo electrónico, o de electro rock, como lo llamo yo, en combinación en ese momento con Juan Pablo Alfieri, baterista de Todo Aparenta Normal. Le comenté que tenía canciones nuevas que no habían quedado en ese disco y empezamos a armar algo nuevo que finalmente grabamos en su estudio Flamingo”, detalla.

El exilio del jaguar cuenta con la participación de Alfieri y de Alan Fritzler, baterista de Barro y Rata Blanca, pero para la presentación oficial que Comotto planea para el próximo 5 de diciembre en el porteño Cultural Morán hará su debut en los parches Mique Nosek. Previamente, habrá un concierto en un festival en Montevideo y en el Bar Mutar de Avellaneda, el 22 de noviembre, en formato de dúo.

Foto: Diego Martínez

–La apertura del disco con “War” pareciera plantear una continuidad sonora con tu disco anterior, pero los siguientes temas cambian la perspectiva. ¿Podría decirse que es tu trabajo más ecléctico?

–No sé si llamarlo ecléctico. Es un disco de rock, de neo rock como yo lo llamo. Tiene canciones acústicas y tal vez la novedad es esa. Hay canciones como “Redes” o “De incógnito” que están más vinculadas al soundtrack. Soy fanático del cine, me encantan compositores como Ennio Morricone o Lalo Schiffrin. Por ahí tiene algo de eso, algo más fílmico de alguna forma. Es una continuación del disco anterior y vamos hacia una transformación, porque ahora ya estoy metido en otro disco, grabando directamente desde los sintetizadores, ya no desde las violas. Están surgiendo un montón de temas que ya vienen desde los sintetizadores porque estoy muy copado con el synth pop: Gary Numan, todo lo que tiene que ver con el post punk, New Order, The Human League, bandas más vinculadas al tecno. Antes las canciones salían de la viola, de una línea de bajo o de alguna programación, pero ahora estoy directamente componiendo desde otro lado, con otra tecnología. Me estoy descubriendo también, investigando nuevos softwares, y está bueno que se dé de una forma ingenua la próxima música, no desde algo que ya sabés cómo funciona por los discos anteriores.

–¿Te sentías encasillado en tu rol de guitarrista a partir de la imagen que tiene el público de vos como músico?

–Puede ser un poco. Por momentos llegué a sentirme preso de la guitarra. Siempre quise que sea la canción la que gobierne mi música, no la guitarra. La guitarra es un anexo de la canción, es algo que la complementa. De hecho, no escucho música que sea solo de violeros: jamás escuché a (Joe) Satriani o a Steve Vai, por ejemplo, con todo el respeto que me merecen porque son músicos tremendos. Siempre busqué una música que esté ayudando a la canción, no que sea presa de la guitarra o del instrumento. Me encantan los discos instrumentales y escucho jazz, no hago una crítica a eso, hablo de lo que siempre busqué y se escucha en los discos anteriores. No hay solos largos, son solos cortos. La guitarra es una pared que complementa la canción. Los violeros que más me gustan y con los que más me identifico son violeros que entienden ese criterio de la acotación, como George Harrison.

Foto: KVK Fotos

–Algunas canciones de El exilio del jaguar como “Buenos días, buenas noches” o “Revolución” bien podrían ser parte del repertorio de Fundamentalistas. ¿Es la experiencia musical que más te influenció?

–No sé, creo que esa es una visión de cada persona. La gente me vincula por haber estado tocando con el Indio o con Luis más que nada, porque con Andrés toqué nada más que dos años, entonces obviamente hay influencias. Es parte de mi historia musical. Son parte de mi vida los procesos en los que contribuí tanto en discos como en conciertos, pero uno siempre está buscando su voz propia y trata de sorprenderse con algo que no se parezca a nada, o al menos eso es lo que uno intenta. Después puede haber tendencias o cosas que van más para un lado o para el otro. Hay gente que me dice que la música que hago es parecida a la de Spinetta y yo no lo veo tan así. No tengo las armonías de Luis, que eran súper complicadas, una cosa que inventó él y yo no la tengo ni en pedo. Otros dicen que lo que hago se parece un poco a lo del Indio. ¿Qué le podés decir a una persona que te dice esas cosas? ¡Gracias! Se me infla el pecho, pero cada cual tiene sus criterios.

–Contás con una trayectoria que supera las dos décadas. ¿Sentís que es cada vez más difícil publicar discos a partir de los cambios que se fueron produciendo en la industria desde tus inicios?

–Yo creo que siempre fue complicado y no va a cambiar eso. Vivir de la música en la Argentina es muy difícil y más vivir de tu música. Por otro lado, trato de no pensarlo tanto, porque si no, no hubiera hecho un disco. Si tengo que pensar en que la gente ya no escucha discos, que sólo escucha singles, o sigo las tendencias de las compañías discográficas… Hago lo que tengo ganas de hacer y “vaffanculo”. ¡Ojalá pueda hacer un disco doble! No me importa lo que haga la gente, sigo en la mía mientras pueda. Me aburren las tendencias, quiero que mi música tome riesgos. Uno tiene que hacer lo que tenga ganas sin fijarse tanto en lo que está sonando, porque si te fijás demasiado podés entrar en un pozo sin salida. Veo la presión que hay en los artistas emergentes, pibes que llenan estadios y entran en una picadora de carne. Hay que ver qué pasa en 20 años con ellos, cómo sigue el tema de la continuidad. Yo creo que hay que cuidarse un poco de eso, hay que tomar riesgos y hay que llevar la música y el arte como uno considera que tiene que ser. Tampoco tirarse a un precipicio, pero no entrar en esa de que hay que hacer las cosas de determinada manera porque es la tendencia.  «

Foto: Diego Martínez

En vivo

Baltasar Comotto presenta El exilio del jaguar el 22 de noviembre a las 21 en el Bar Mutar, Avenida Bartolomé Mitre 982, Avellaneda; y el 5 de diciembre a las 21 en Cultural Morán, Pedro Morán 2174 (CABA).

El exilio del jaguar – Baltasar Comotto

  1. “War”.
  2. “Espejos”
  3. “Buenos días, buenas noches”.
  4. “Revolución”.
  5. “Atracciones”.
  6. “Redes”.
  7. “Narco”.
  8. “El exilio del jaguar”.
  9. “Smash”.
  10. “Corriendo con lobos”.
  11. “Zombie”.
  12. “Mil ojos”.
  13. “Témpano”.
  14. “De incógnito”.