Este es un film que busca mostrar una manera de mirar al mundo. Bajo el sol del rocanrol, que estrena el primer día de agosto, se enfoca en una figura de la contracultura argentina de los ‘70, editor y periodista Jorge Pistocchi, creador de cuatro revistas emblemáticas de los años ‘70 y ‘80 (Mordisco, Expreso Imaginario, Zaff y Pan Caliente) y un emblema de una generación que con el rock como aglutinante, buscaban generar un espacio de pensamiento independiente, de acción comunitaria y de experimentación.

Con testimonios de Marta Kelly, Miguel Grinberg, Moris, Rocambole, Pipo Lernoud, Alfredo Rosso, Claudio Kleiman, Daniel Ripoll, León Gieco, Andrés Calamaro, Edelmiro Molinari, Pablo Perel, entre otros, es un retrato bien completo, que busca atraer amantes de la música pero también generar una conciencia de cómo enfrentar ambientes hostiles sociopolíticos. Los creadores de este documental son Mónica Simoncini y Omar Neri, que además de ser egresados de la Universidad Popular de Madres de Plaza de Mayo se dedican al cine documental desde 2001. Juntos dirigieron Uso mis manos, uso mis ideas, Gaviotas blindadas, Seré millones y como montajistas, trabajaron en más de 30 largos documentales. “No los presentó un amigo en común y era un personaje no tan conocido. Conocía sus revistas pero no todo lo que había hecho. Es un prócer del rock nacional y hacía falta reivindicarlo de alguna manera y empezamos a visitarlo y a idear un documental sobre sus vivencias”, afirma Neri, que con su compañera lo visitaron durante dos años hasta que murió en 2015. Pero el trabajo continuó. “Armamos un registro de su historia, no pudimos terminar de charlar, pero nos dejó el eje central de la película, contando su historia de primera mano.  Después nos hicimos de todos los recursos cinematográficos posibles para  concluir y hacer honor a tan importante personalidad.  En sus revistas había una estética muy atractiva a la que teníamos que hacer también honor”, cuenta el realizador.

Con una estética atractiva y dinámica se relata la figura clave Pistocchi y su huella en la cultura rock de manera profunda. Porque además de sus publicaciones, era un buscador incansable: creó el Centro Cósmico en la Paternal a principio de los 80´, donde funcionó un Centro Experimental de Video y se organizó la primera cooperativa de verduras y frutas agroecológicas. Pocos meses antes de la Guerra de Malvinas, organizó en el Club Excursionistas el “Festival Pan Caliente”, que contó con los músicos importantes como León Gieco, Lito Nebbia, Alberto Muñoz, Los abuelos de la Nada, Willy Quiroga y Los Redonditos de Ricota (en la única actuación en un festival que tuvieron en su carrera). Por otro lado en los años 90´ protagonizó una de las primeras experiencias de fábricas recuperadas por sus obreros, al mismo tiempo que acompañó al incipiente movimiento Heavy Metal argentino, y el renacimiento de la Galería Bond Street, así como el Centro Cultural Expreso imaginario, en el barrio de La Boca, que creó en 2002, todavía hoy funciona y donde Pistocchi vivió hasta que falleció. “Era un desafío y un riesgo hacerla. Porque era tratar de mostrar porque fue tan importante. Por suerte, con Mónica trabajamos hace mucho juntos, entonces en nuestro rol de codirección, jugamos de memoria, como se dice. Además, como montajistas tenemos experiencias así que ahí nos entendimos. Pero fluyó y pudimos sumar todas las miradas necesarias para que quede como quedó. Y como le hubiese gustado a Jorge, es un trabajo colectivo”, afirma  Neri, quien junto a su dupla, también está trabajando en Resistenza, una película que estrenará para fin de año, que trata sobre los exiliados argentinos en Roma

-¿Es un ejercicio de memoria también un documental de estas características?

-Sin dudas, por esto nos dedicamos a esto también. Además, visto desde hoy hay peleas que siguen siendo las mismas, cambian los contextos, pero hay elementos que se repiten y se reflejan en la actualidad, eso siempre es interesante de analizar. Nos interesó mostrar cómo Pistocchi desde los años ‘60 comenzó a adquirir algunas ideas que hoy son importantes: el cuidado del medio ambiente, el pacifismo y la crítica a las guerras y la violencia como recurso. También él integraba en su tarea lo que era la cosmovisión de los pueblos originarios. En la última etapa de su vida estuvo cercano a las reivindicaciones de los afrodescendientes y sus tambores. Son temas que atraviesan las décadas y aún hoy siguen vigentes. Eso nos parecía interesante de la historia.

-¿Qué se siente estrenar en este contexto?

-Es importante, hace años que venimos peleando como documentalistas para darle prioridad y fuerza  a este tipo de films. Todo el mundo documental tiene que tener un espacio importante para la tarea de contar aquello que quizás nunca se contó o hacerlo de otra manera. La lucha por mejorar esto hoy más que nunca tiene mucha importancia. El estreno es cerrar el círculo de un proyecto, es una ventana, un momento de abrirse para colaborar y sentir que quizás contándole algo a alguien lo movemos a la acción o a pensar algo que puede mejorar la realidad.  Es un momento donde tenemos que construir comunidad, hay que congregarnos, para decir somos muchos los que creemos y pensamos de otra manera. Es una oportunidad para expresarnos, para decir lo que pensamos y mostrar con lo que estamos de acuerdo y con las que no. Nuestras propuestas hablan de nuestra postura, pero una vez que se estrena ya nos desprendemos. Lo que importa en este caso es que se conozca la historia y la mirada de Pistocchi y de toda la generación que lo acompañó. Sentimos alegría de poder estar en los cines, a pesar de que algunos no quieran.

-¿Cómo decidieron la estética de la película?

-Siempre buscamos una vuelta para que quede atractiva.  Sobre todo porque hay un prejuicio que muchas veces pesa en el público que entiende el documental como algo aburrido, pero no necesariamente tiene que ser así.  Eso es una manera de defenestrar y quizás alejar a la gente de un género que quizás invita a pensar y muestra muchas veces verdades ocultas o silenciadas. Por otro lado había en Pistocchi algo visual. Expreso Imaginario fue un gran ejemplo: tenía calidad en notas, en una estética que rompía con lo establecido, pero además traía toda una carga filosófica que daba entender que había otra forma de sentir la vida por fuera del conservadurismo reinante. Eso atraviesa toda coyuntura. Por eso tratamos de mantener la línea de su lógica para contar, cómo desde hacer una revista para jóvenes, también se podía involucrar en las fábricas recuperadas cuando nadie lo hacía y hacer todo lo que hizo. Todo lo condensamos en esta película y lo hicimos con la estética de sus creaciones. Este es un trabajo que nos lleva gran un trabajo creativo no sólo para encontrar la historia, sino en cómo contarla. Es fundamental.


Bajo el sol del rocanrol

Documental de Mónica Simoncini y Omar Neri sobre Jorge Pistocchi. Con testimonios de Marta Kelly, Miguel Grinberg, Moris, Rocambole, Pipo Lernoud, Alfredo Rosso, Claudio Kleiman, Daniel Ripoll, Resorte Hornos, Jorge Kaczewer, León Gieco, Andrés Calamaro, entre otros. Estreno: 1 de agosto. En cines.