El Sudamericano Sub 20 comenzó en enero con una amenaza de Patricia Bullrich: Argentina no jugaría en Venezuela. La AFA, sin embargo, confirmó la participación y, ya desde lo futbolístico, la selección de Diego Placente (reemplazante de Javier Mascherano) cumplió un objetivo detrás de otro en Caracas: incluso estuvo este jueves, con el triunfo 1-0 parcial con gol de Claudio Diablito Echeverry, a 12 minutos de salir campeón sudamericano.
Sin embargo, los brasileños empataron 1-1 sobre el final y estiraron hasta el domingo lo único que queda por resolverse, quien se llevará el título, un premio simbólico. «Nos vamos con tristeza porque teníamos el partido controlado. No nos habían generado peligro», dijo Echeverry, la figura de Argentina.
Lo más importante, claro, fue la clasificación ya asegurada al Mundial de la categoría, que se jugará en Chile en octubre de este año: Argentina la consiguió en el partido anterior, tras el triunfo ante Colombia. Pero si un hecho inolvidable dejó este Sudamericano fue el 6-0 en la primera fecha a Brasil, justamente, en la mayor goleada de la historia ante el máximo rival.
Tras el 1-1 de anoche, Argentina y Brasil llegan a la última fecha igualados en el primer puesto, con 10 puntos. Sin embargo, los brasileños tienen una ventaja en diferencia de goles, de más 4, contra más 3 de los argentinos.
Al torneo le falta una fecha, que se jugará este domingo: Argentina enfrentará a Paraguay y Brasil a Chile. Los cuatro equipos ya están clasificados al Mundial. Argentina tendrá que sumar más puntos que los brasileños o, en caso de igualdad, mejorar su diferencia de gol.
El 1-0 parcial de este jueves por la noche llegó tras un penal «picado» por Claudio el Diablito Echeverry, el ex jugador de River, que tras el torneo deberá sumarse al Manchester City y hoy se sumó al colombiano Néiser Villarreal como máximos goleadores del Sudamericano, con 7 tantos. El Diablito salió reemplazado, lesionado, a 20 minutos del final, una ausencia que condicionó el resto del partido.
Sumado a la primera fase, Argentina ganó 5 partidos, empató 3 y sigue invicto. El equipo de Placente busca su sexto título continental, tras los ganados en Paraguay 1967, Chile 1997, Argentina 1999, Uruguay 2003 y Uruguay 2015. En esta última edición, jugaban futbolistas como Ángel Correa, Sebastián Driussi y Giovanni Simeone. Brasil es el máximo ganador, con 12, seguido por Uruguay, con 8.
Argentina, rey mundial
Paradójicamente, la selección ganó más Mundiales que Sudamericanos, 6, y es el máximo campeón mundial de la categoría: 1979, 1995, 1997, 2001, 2005 y 2007. Uruguay, campeón del mundo vigente, fue el gran fracaso del actual Sudamericano en Venezuela: quedó eliminado y no jugará el Mundial de Chile. Los representantes de Conmebol serán Argentina, Brasil, Colombia, Paraguay y el local.
La superioridad argentina en el primer tiempo fue tal que Brasil salió a esperar a su rival como hacen los equipos que se reconocen inferiores. El gol llegó de penal, es cierto, pero luego de una incursión ofensiva de uno de los laterales de la selección, Julio Soler, el lateral de Lanús, víctima del foul. La ejecución del penal corrió por cuenta de Echeverry, que la picó con maestría.
Argentina, sin embargo, cedió su dominio en el segundo tiempo y Brasil llegó al empate en la primera jugada de riesgo, cuando Rayan marcó el 1-1 ante una defectuosa defensa del arquero Jeremías Martinet. Luego le siguió un final caliente entre los jugadores.
Ahora resta esperar hasta el domingo: Argentina debe vencer a Paraguay o esperar que Chile le saque puntos a Brasil. Pero el objetivo está cumplido. Y con yapa histórica, un 6-0 que no se olvida.
