Días después de conocerse el caso de un chico en una escuela del partido de General San Martín, noroeste del Gran Buenos Aires, acusado de vender fotos de compañeras editadas con Inteligencia Artificial para que parecieran desnudas, surgió otro caso en las últimas horas, esta vez en Chaco.

Alumnos de una escuela secundaria de Resistencia fueron denunciados por la venta de fotos de compañeras desnudas creadas con Inteligencia Artificial (IA). Según afirmaron familiares, los menores ofrecían las imágenes por WhatsApp y Telegram y hay temor por el incremento de este tipo de casos en el país.

La situación se conoció el viernes pasado, cuando las víctimas constataron que varios de sus compañeros utilizaron fotos de sus redes sociales, las editaron con IA y luego las vendieron por diversos canales de comunicación.

Medios locales detallan que ante esta situación las adolescentes enfrentaron a sus compañeros. Al no recibir respuestas, comunicaron lo sucedido a sus padres.

Se cree que hay al menos siete chicas víctimas de esta grave edición de material de abuso sexual infantil, aunque por el momento solo una hizo la denuncia formal.

Ante la viralización del caso, los padres de los acusados se presentaron en la escuela y manifestaron ponerse a disposición para poder ayudar a resolver la situación.

Los padres de las víctimas se mostraron atemorizados y pidieron algún tipo de medida contra los estudiantes.

Desde la escuela afirmaron que no habrá ninguna sanción al comprobarse que “los hechos sucedieron fuera de la institución y por fuera del horario escolar”. Mientras, sigue siendo inexistente la enseñanza de las consecuencias del uso de la Inteligencia Artificial en las escuelas argentinas, a la par que el uso irrestricto de redes y pantallas se multiplica, sin regulación y ni siquiera conocimiento de la mayoría de las familias de adolescentes.

Cómo sigue la causa del adolescente de San Martín

En relación al caso del alumno del Colegio Agustiniano, ubicado en San Andrés, partido de San Martín, acusado de vender material fotográfico de abuso sexual infantil, donde sus compañeras aparecían desnudas por una edición con Inteligencia Artificial, la fiscal Verónica Novoa, avanza con diversas medidas.

Fuentes judiciales precisaron que ya le tomó declaración el pasado viernes al director del colegio. Y aguarda por el resultado de la pericia que se le realizó el lunes al teléfono celular del joven, menor de edad, que sigue asistiendo al establecimiento.

Aún no se sabe qué imputación caería sobre el muchacho. La fiscal Novoa ordenó extraerle el IMEI del teléfono –código que identifica al aparato de forma exclusiva a nivel mundial- para así poder realizar los análisis.

Esta semana también podría determinar una restricción perimetral para que el chico de 15 años no pueda acercarse a sus víctimas, con quienes se cruza cotidianamente en el colegio.