Después de cuatro meses consecutivos de mejoras, el uso de la capacidad instalada de la industria retomó una senda de contracción. Es que, según el informe del INDEC que se conoció el miércoles, la industria nacional se encuentra operando en un 62,3% de su capacidad. Dicho de otra forma, casi cuatro de cada 10 máquinas disponibles se encuentran apagadas como resultado de la profunda recesión que todavía arrastra la economía nacional.

El dato implica una caída de 0,9 puntos porcentuales con relación a octubre de 2024 y a la vez se ubica 4,1 puntos por debajo de lo que había ocurrida durante el mismo mes del año 2023. Los meses previos que habían mostrado una mejora con relación al mes inmediato anterior, sin embargo, estuvieron siempre por debajo de lo que ocurrió en el mismo mes de 2023. Ese fenómeno se repitió en cada uno de los once meses de 2024 aunque, a partir de julio, la curva intermensual comenzó a mostrar señales positivas que se vieron interrumpidas en la última medición relativa al mes de noviembre.

El sector del caucho y plástico opera en apenas el 46,8% de su potencialidad, el más bajo.

El indicador resulta coherente con los resultados de otro de los principales informes sectoriales que realiza el instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) conocido como Índice de Producción Industrial que mide el volumen de la producción y en noviembre marcó un leve crecimiento con relación a octubre de 0,4% pero arrastra 18 meses consecutivos de caídas interanuales y un retroceso en los primeros once meses de 2024 que llega al 10,7%.

A la hora de analizar el indicador de uso de capacidad instalada por sectores surge una marcada heterogeneidad. En un extremo, el sector del caucho y plástico operó en noviembre en un 46,8% de su potencialidad. Muy cerca las manufacturas vinculadas con Productos del Tabaco lo hicieron en un 47,6% muy cerca del sector de textiles que lo hizo en apenas un 48,2%. Justo a la mitad de su capacidad (50%) operó el sector metalmecánico (sin autos) y algo por encima (53%) el sector de ediciones e impresión.

En la otra punta la refinación del petróleo hizo uso de un 82,1% de su capacidad seguido, muy de lejos, por el sector del papel y cartón (68,6%), industrias metálicas básicas (67,2%) y el sector alimenticio y de bebidas que lo hizo en un 66,9% y los productos químicos que operaron al 66,1%.

La refinación del petróleo encabeza el uso de la capacidad instalada con un 82,1%.
Foto: Télam

Más cerca del promedio medio se ubicaron la industria automotriz con un 64,7% y los minerales no metálicos (60,6%).

Las dificultades de la industria surgen a partir de una combinación de tres factores fundamentales. Por un lado la profunda recesión en la que ingresó la economía como resultado del ajuste promovido por el gobierno que golpea al consumo interno, en segundo lugar por la política de apertura comercial que lleva adelante el gobierno y, por último, como resultado de la marcada apreciación del tipo de cambio que afecta las exportaciones de productos manufacturados y alienta la importación de bienes de consumo que compiten con la producción local.