En Padrenuestro, la novela de Adriana Pedrolo prologada por Alicia Dujovne Ortiz que publicó Ediciones Desde el Pie, la autora transita el escabroso camino del abuso sexual intrafamiliar. Con valentía y rigurosidad, pero también con mucho espacio para la reflexión, recorre la historia del descubrimiento del hecho, su impacto y sus consecuencias. 

“¿Y ahora qué?” es el título del capítulo treinta y tres, el último de la novela. Sin embargo, podría ser el que inaugure la historia ya que ese interrogante es el motor de toda la narración. ¿Qué se hace cuando se devela el secreto? ¿De qué modo se procesa esa información? ¿Cómo se extraen las esquirlas del estallido de la figura del padre, protagonista del hecho, del cuerpo de la hija que escucha lo atroz?

No es una tarea fácil. El tiempo da su veredicto: se impone plasmarlo en papel: “La escritura llega como un intento de punto cardinal, como una constelación amiga en medio del caos, que necesita de una nota madre para reordenar el silencio sideral de nuestras penas en un nuevo sentido: más franco, más útil, revelador y por qué no, en el mejor de los casos, más fecundo,” dice Pedrolo. Fijarlo en el papel como una forma de expiación personal para una historia que pesa demasiado, lo doméstico y lo filial, fantasmagórico. 

El papel de las mujeres en la novela de Pedrolo

El papel de las mujeres es central en la obra: narran, pero también silencian. Tratan de buscar razones: “Tu papá es hijo de una violación”. Pero también militan: “Los ideales, en cambio, eran públicos cuando mi abuelita Emilia volvía a casa después de recorrerse todo el barrio a pie con los bonos de recaudación de la campaña financiera del Partido.”

Y no todas pueden permanecer en los territorios donde nacieron, anhelan partir y así lo llevan a cabo: “Lo que caracteriza un destierro, sobre todo en su primera etapa, es una suerte de aislamiento que se va sobrellevando de a poco, gracias a nuevas y reveladoras experiencias.” Pero la novedad distrae solo el efímero instante. Los recuerdos siguen ahí, duelen y  continúan en proceso. 

El dolor del develamiento no se encuentra solo en la intimidad filial. El relato parte de lo doméstico y se expande a la comunidad en la que este hombre es idolatrado por su militancia política en la izquierda. Referente indiscutido de sur del conurbano bonaerense, su hacer público encandila lo real de su oscuridad en lo privado.  

Padrenuestro transita una historia biográfica pero, porque lo personal es político, conlleva una gran actualidad. Interpela a la acción, a la defensa de derechos tan en riesgo en Argentina en 2024. Por otra parte, también es un texto que intenta guiar, acompañar y proteger a víctimas y personas cercanas a ellas con recomendaciones y recomendaciones para ello. Por último, es un documento histórico que releva las luchas feministas de las últimas décadas, no solo en las acciones concretas sino en las representaciones que tuvieron desde un comienzo y cómo fueron mutando. 

La novela de Pedrolo, es un texto que habla del dolor, de la necesidad de tomar distancia, del exilio, pero también de la presencia y de la redención, de la compañía y la búsqueda de respuestas. Pedrolo logra narrar lo más dramático de una manera sutil, pero sin tapujos, escribiendo en su carne viva preguntas y posibles respuestas. 

Padrenuestro, la novela de Adriana Pedrolo, se presenta este viernes 6 de septiembre, a las 19 en Librería Café Ciccus, Alsina 865, CABA.  Habrá una conversación de la que participarán Analía Boscato, Lic. en Psicología, psicóloga jurídica especialista en peritajes, miembra Red Viva, docente UBA, investigadora y autora de Pequeñas víctimas; Sara Barni Abogada, miembra de la Red Viva y madre protectora; Gonzalo Romero, de Librería Ciccus y la autora. Modera: Celia Pagán.