La Administración Nacional de la Seguridad Social (ANSES) anunció el incremento de los haberes jubilatorios pautado para el cobro del mes de agosto de este año.      

Según lo establecido por el decreto 274/2024 el incremento surge de la inflación registrada por el INDEC en el segundo mes inmediato anterior al cobro del haber. Aquel DNU que dejó sin efecto la fórmula de actualización vigente indicó también que, a la espera de una nueva fórmula definitiva, el gobierno ofrecería como garantía que, durante el segundo trimestre, tomaría el indicador que resultara más favorable a los jubilados.

La UNDAV estimó la caída de la jubilación en términos reales.

Según el IPC del mes de junio publicado el pasado viernes la suba correspondiente al mes de agosto será de 4,6%. A pesar de eso, según un informe del Observatorio de Políticas Públicas de la Universidad Nacional de Avellaneda (UNDAV), los haberes jubilatorios quedarán por detrás de la suba de precios en todo el período de gobierno de Javier Milei.

El estudio indica que, entre noviembre de 2023 y junio de 2024 los jubilados de la mínima, incluyendo el bono de $70 mil, habrán perdido un 1,4% de sus ingresos en términos reales. Pero además, la suba de las jubilaciones implicó una pérdida del poder adquisitivo del 10,4% con relación a la suba del valor de los medicamentos y de un 20,7% con relación a los servicios públicos. Se trata de bienes y servicios de consumo prioritario para la tercera edad.

Medicamentos y servicios públicos, consumos prioritarios para la tercera edad.

Es que, en el período, los haberes jubilatorios mínimos incluyendo el bono se incrementaron un 122,5% cuando los precios lo hicieron en un 125,6% y la canasta de medicamentos escaló un 148,4%.

El Observatorio detalló que los medicamentos anti plaquetarios escalaron un 183% mientras que aquellos destinados a la atención de patologías de tiroides subieron un 160%. Los anticoagulantes se encarecieron un 129% al igual que los fármacos cardiológicos. Los destinados a controlar la hipertensión subieron un 153% y los que sirven apra controlar el colesterol lo hicieron un 142%. En todos los casos se trata de subas que superan holgadamente el incremento de apenas un 122,5% que registraron los jubilados.