El 8 de marzo de 1994 Soundgarden lanzaba Superunknown, su cuarto disco y acaso el mejor de su carrera. La banda formada en Seattle por Chris Cornell, pilar del movimiento grunge que representó, con un estilo inconfundible, junto a grupos como Nirvana, Pearl Jam y Alicen In Chains, entregaba una verdadera obra maestra del rock. Enalteciendo sus -ya conocidas para entonces- influencias del rock y el heavy metal de los ’70, el blues y la psicodelia, el grupo lograba desplegar su estilo en su punto cúlmine.
El álbum tuvo varios hits, sostenidos por sus correspondientes videos, como el sutil y avasallante “Black Hole Sun”, uno de los trabajos visuales más impactantes de la época, la no menos instrospectiva “Fell On Black Days”, el festivo y rítmico “Spoonman” y el machacante “The Day I Tried to Live”, una canción con el sello 100% Soundgarden. Pero más allá del criterio discográfico, la lista de temas de Superunknown no tiene desperdicio: es imposible elegir, para el escucha avezado, entre los 15 cortes que hacen al disco.
El grupo que formó en 1984 Chris Cornell, uno de los cantantes y compositores más destacados del rock de los últimos tiempos, luego de cambios en su lineamiento encontró un verdadero equipo de los sueños con el guitarrista Kim Thayil, el bajista Ben Sheperd y el baterista Matt Cameron. Luego del lanzar de forma independiente Ultramega Ok (1988) y Louder Than Love (1989), la consagración llegaría con Badmotorfinger (1991), disco que contiene temas como “Rusty Cage”, “Holy Water” y “Outshined”. Después de Superunknown y Down on the Upside (1996), la banda se separaría en 1997.
Casi trece años y con los integrantes dedicados a otros proyectos, entre ellos, la fructífera carrera solista de Cornell y la creación de Audioslave, el grupo que tuvo junto a Tom Morllo de Rage Against The Machine, en 2010 volvieron a reunirse y en 2012 lanzaron un nuevo álbum, King Animal. De todas formas, Soundgarden ya no era un proyecto a tiempo completo para ninguno de los músicos, y el inesperado fallecimiento de Cornell en 2017 dio por concluida formalmente la actividad del grupo.
A tres décadas de su lanzamiento, Superunknown es al mismo tiempo disco más significativo de Soundgarden, una de las obras fundamentales del grunge y uno de los mejores álbumes de rock que puedan encontrarse.