El Tribunal en lo Criminal N° 5 de La Matanza, presidido por el juez Matías Mariano Deane, dictó 18 años de prisión para el policía Kevin Ariel Vallejos -que fue declarado culpable por un jurado popular en mayo pasado- por el homicidio de Esteban “Juje” Bellido, de 39 años. Sucedió durante un operativo que se realizó en Virrey del Pino el 31 de octubre de 2022 y que culminó con el asesinato del hombre. La Comisión Provincial por la Memoria (CPM) participó del juicio como particular damnificada institucional y acompañó a los familiares desde el primer momento.
Fue un gravísimo hecho de violencia institucional ocurrido en el barrio Vernazza de Virrey del Pino. Ese día Bellido se cruzó con un operativo de prevención a cargo de la Unidad Táctica de Operaciones Inmediatas (UTOI) del que participaron once efectivos que se movilizaban en tres patrulleros. La víctima recibió un disparo en la zona del hemitórax que le provocó la muerte y otro en la muñeca izquierda.
Gatillo fácil
Según los testimonios que se escucharon durante el desarrollo del debate oral y público: “El grupo de policías -compuesto por los tres uniformados- que llegaron a juicio efectuó más de doce disparos sin ningún motivo para hacerlo; no lo pudieron justificar”, aseguró Roberto Cipriano García, abogado y secretario ejecutivo de la CPM, a Tempo.
También señaló que el ataque policial fue por la espalda, “mientras la víctima intentaba ponerse a salvo recibió un tiro en la zona del hemitórax que le provocó la muerte y otro en la muñeca izquierda”, reconstruyó el secretario ejecutivo. Los funcionarios imputados trataron de justificar el homicidio del hombre, “diciendo que Bellido estaba armado, pero nunca lo pudieron comprobar”.
El veredicto de culpabilidad sobre el policía Kevin Vallejos lo dictó un jurado popular el pasado mes de mayo, “por el delito de homicidio agravado por el uso de arma de fuego, en esa misma oportunidad declaró no culpables a sus compañeros de fuerza Maximiliano Villalba y Nicolás Torres”, recordó el abogado.
Sobre la condena a prisión del imputado
La fiscalía había pedido 27 años de prisión, “nosotros solicitamos 33 años y 3 meses, más 10 años de inhabilitación especial y como medida de reparación”, detalló el letrado. Además, demandaron ante la Justicia al Estado de la Provincia de Buenos Aires,” para que le brinde atención de salud integral al hermano de la víctima, para que pueda acceder a un tratamiento que mitigue el impacto por la muerte de su ser querido”.
El juez Mariano Deane -presidente del TOC 5 de La Matanza- dictó una condena de 18 años de prisión, “porque pudo acreditar que el policía Vallejos efectuó varios disparos con su arma reglamentaria con intención de dar muerte a Bellido”, remarcó García. También apuntó que “nosotros y la fiscalía habíamos señalado varios agravantes que el magistrado pasó por alto, como ser, la alevosía con la que se cometió el homicidio”.
En febrero de este año -por el mismo caso- fueron condenados ocho uniformados de la UTOI de la Policía Bonaerense: Gonzalo Javier Díaz; Daiana Noelia Bazán; Javier Egberto Iman; Federico Daniel Florencio; Matías Ezequiel Silva; Nicolás Jorge Acota; Sofía Alejandra Benítez y Florencia Belén Coria Barrios. Todos ellos aceptaron una condena de dos años de prisión e inhabilitación especial por el doble de la condena, bajo la modalidad de juicio abreviado.
Acusados de haber cometido el delito “de violación de los deberes de funcionario público”, recordó el secretario ejecutivo. Los miembros de la fuerza de seguridad, “a pesar de haber sido parte del operativo y de escuchar los disparos, ninguno de ellos dio aviso sobre lo ocurrido”, cerró el abogado.
Muerte bajo custodia del Estado
Nahuel Olmos tenía 27 años. Fue detenido el lunes 19 de junio de 2023, por una contravención. Dos horas después ingresó al Hospital Interzonal de Agudos con un cuadro de paro cardiorrespiratorio. Allí, los médicos lograron estabilizarlo; pero el daño cerebral fue irreversible y finalmente falleció el 29 de agosto.
El titular de la Fiscalía 5 de Mar del Plata, Alejandro Peregrinelli, había determinado que la muerte de Olmos en la Subcomisaría Casino, fue un suicidio y cerró el caso sin haber agotados todas las instancias de la investigación. “Solo tomó en cuenta la versión policial de los efectivos de la Policía Bonaerense”, apuntó el abogado.
La víctima había sido denunciada por disturbios, estaba en estado de ebriedad. Fue trasladado a la dependencia policial, donde le labraron una contravención: “Allí lo encerraron en una celda y, según la versión oficial, cuando volvieron a buscarlo parecía que estaba dormido contra la reja y no reaccionaba”, explicó el letrado.
A un año de los hechos ocurridos, los familiares siguen reclamando justicia y que vuelvan a investigar el caso:” Nosotros pedimos que la causa sea desarchivada, también que se designe una nueva fiscalía y se evalúe el accionar del fiscal Peregrinelli”, finalizó el secretario ejecutivo.
Es por todo ello que los familiares del hombre fallecido -junto a este organismo provincial- reclaman encarecidamente que desarchiven la causa y que vuelvan a investigar los hechos acontecidos mientras el hombre se encontraba bajo custodia del Estado. Porque estiman que fue un hecho de violencia institucional cometido por los efectivos de la Subcomisaría Casino de Mar del Plata.
