Uno de los informes de inteligencia ilegal hallados en la computadora del ex policía Ariel Zanchetta descalificaba a la diputada de Juntos por el Cambio Marcela Campagnoli por un supuesto pasado kirchnerista.
De hecho, ese documento en formato pdf desclasificado por la DAJUDECO –el organismo técnico que depende de la Corte Suprema y filtra a cuentagotas el contenido de los dispositivos de almacenamiento de Zanchetta- fue el basamento de un artículo periodístico publicado en el sitio de internet Semanario de Junín, el lugar en el que vivía el ex espía inorgánico hoy detenido. Y cita como fuente a la Agencia Nova, otro sitio de internet para el que decía trabajar Zanchetta.
Según consignó el fiscal Gerardo Pollicita, “de la documentación aportada surge una conversación que data del año 2017, mediante la cual el usuario ‘aaa’ vinculado al abonado xxxxxx le remite a una cuenta identificada como ‘Maldonado Miguel’, un documento denominado ‘Campagnoli_iglesias_devido.pdf’ indicando ‘para la justicia’”.
El dictamen no avanza sobre quién es Miguel Maldonado ni tampoco precisa el contenido del documento. Sin embargo, el 8 de junio de 2017, en pleno auge del gobierno de Mauricio Macri, Semanario de Junín publicó un artículo en el que describe que “la secretaria de Educación del distrito de Pilar, Marcela Campagnoli, es una dirigente que responde a Elisa Carrió que suena para ocupar un lugar en las listas de diputados nacionales de Cambiemos, a pesar de los vínculos directos que mantiene con algunas causas de corrupción que salpican a la gestión de Cristina Fernández de Kirchner”.
Campagnoli es diputada desde 2017. Integra Juntos por el Cambio como miembro de la Coalición Cívica y se le reconoce cercanía con la líder de esa agrupación, Elisa Carrió. Es una fervorosa antikirchnerista y proclama su gestión como una cruzada contra la corrupción.
No obstante, la nota en el portal de Junín la muestra en una fotografía en medio del ex ministro de Planificación Julio De Vido y del ex secretario de Obras Públicas José Francisco López, el de los bolsos.
El artículo explica que Marcela Campagnoli era, por entonces, “funcionaria del gobierno de Nicolás Ducoté” y “hermana del fiscal José María Campagnoli, un enemigo declarado de la gestión de la ex presidenta CFK a quien acusó de ‘hipócrita’ y de ser ‘peor que el menemismo’, además de ser quien inició la investigación que terminó con Lázaro Báez detenido, y que podría complicar la situación judicial de la ex mandataria”.
En abril de 2022 Ducoté fue enviado a juicio oral por corrupción en la función pública. El juez federal de Campana, Adrián González Charvay, había dictado el procesamiento del ex intendente de Pilar (2015-2019) por “administración infiel en perjuicio de la administración pública” en tres convenios firmados en 2016 con el gobierno de Macri.
Del documento hallado en la computadora de Zanchetta surgió la información que fue publicada sobre Marcela Campagnoli. “Lo que pocos saben es que la referente provincial de la Coalición Cívica es también esposa de Guillermo Iglesias, un empresario de la construcción, que fue durante un tiempo secretario de Obras Públicas del kirchnerista Gustavo Menéndez en Merlo, para luego pasar a cumplir esa misma función en el distrito de Pilar. Entre sus empresas tiene a Alemarsa SA, principal contratista de obra pública en distritos de la primera sección electoral en el momento en que según las denuncias de la propia Carrió, todo se decidía en el despacho del ministro de Planificación Federal, Julio De Vido”.
“Iglesias –añadía la nota publicada en tiempos concomitantes con la fecha del informe de inteligencia ilegal- está también vinculado al Grupo Farallón, de Eduardo Gutiérrez, propietario entre otras cosas, del chalet que habitaba el ex subsecretario de Obras Públicas del kirchnerismo, José López, cuando fue encontrado escondiendo los bolsos con 9 millones de dólares”.
El artículo avanza en cuestionamientos sobre Campagnoli, quien podría sumarse a la lista de querellantes en el expediente que lleva adelante el juez Marcelo Martínez de Giorgi.