«Nos conocemos mucho, vamos a hablar de temas que beneficien a ambos países, comercio, compras de material militar. Nos queda mucho por hablar. Vamos a rememorar un poquito el trabajo que hacíamos en el pasado», dijo el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, en el brevísimo discurso que ofreció en el Salón Blanco de la Casa Rosada junto a su par anfitrión Mauricio Macri.
«Quería decirles que hace años que soy amigo de Mauricio. Era un hombre joven y muy bien mozo. Nos conocíamos muy bien. En realidad, hice negocios con su familia, con su padre, excelente y muy buen amigo mío», elogió el inquilino de la Casa Blanca, que arribó por la explanada norte de la Casa de Gobierno a las 7.20, casi media hora después de la hora prevista para el encuentro entre ambos jefes de Estado. La demora fue adjudicada a los mensajes de Twitter que lanzó Trump desde el Palacio Duhau, donde se alojó, para desmentir que le haya ofrecido a interlocutores rusos desarrollar una torre Trump en Moscú durante su campaña presidencial, investigada por la presunta injerencia rusa en su desarrollo.
La brevísima visita que hizo Trump esta mañana en la Casa Rosada fue para reemplazar la visita oficial que le había prometido hace un mes, para arribar originalmente a Buenos Aires este jueves, algo que finalmente no se concretó. En su lugar, el mandatario estadounidense aterrizó anoche a bordo del Air Force One acompañado por su esposa Melania Trump y una comitiva integrada por el secretario de Estado, Mike Pompeo; el jefe de Gabinete de la Casa Blanca, John Kelly; el ex columista televisivo y asesor económico Larry Kudlow; el consejero de Seguridad Nacional, John Bolton; la portavoz Sarah Sanders y el embajador estadounidense en Buenos Aires, Edward Prado.
El elenco de funcionarios norteamericanos, en su mayoría vinculados a temas de seguridad, fueron recibidos por Macri, que estuvo acompañado por el jefe de Gabinete, Marcos Peña; la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich; el canciller Jorge Faurie; el secretario de Asuntos Estratégicos, Fulvio Pompeo; el ministro de Hacienda Nicolás Dujovne y el embajador argentino en Washington, Fernando Oris de Roa.
Tal como anticipó Trump, la agenda estuvo dedicada a comercio y seguridad. «Macri le explicó sobre Vaca Muerta y también hablaron sobre narcotráfico y otros temas vinculados a la seguridad regional», confió a Tiempo una fuente de Casa Rosada luego del encuentro.
En público, Macri también aprovechó para agradecer el apoyo de Trump en las gestiones ante el Fondo Monetario Internacional (FMI). «Es momento de agredecer el apoyo que hemos tenido de su gobierno, con el acuerdo con el Fondo», puntualizó el mandatario argentino.
Otro de los ejes del encuentro estuvo concentrado en Venezuela, «en la situación de los emigrantes y la crisis humanitaria», que el gobierno de Nicolás Maduro niega. La portavoz Sanders dijo que «los dos líderes reiteraron su compromiso compartido de enfrentar los desafíos regionales como Venezuela y la actividad económica depredadora china». La aclaración de la Casa Blanca excedió las declaraciones generales que hicieron el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, y el canciller Jorge Faurie, que definió la cita como una demostración del apoyo de Estados Unidos a la administración de Macri.
En la declaración que compartió con Macri, Trump lo elogió para recordar cuando se conocieron, aunque evitó mencionar los momentos traumáticos que afrontó el Grupo Macri cuando el magnate se encargó de sacarlo de los negocios inmobiliarios de la Gran Manzana. «Hubo un gran trabajo exitoso, uno de los grandes trabajos que hicimos en Manhattan, en la época en que yo era solamente un ciudadano civil, sin saber que su hijo, en un momento, se convertiría en presidente de Argentina. Y, creo que tú tampoco sabias que yo me iba a convertir en presidente de los Estados Unidos. Es un honor estar aquí con ustedes, amigo mío, hace mucho que nos conocemos, gran familia, excelente trabajo», concluyó el republicano.
