A un paso del endurecimiento de la cuarentena en el AMBA, una encuesta realizada en la provincia de Buenos Aires revela que el 55,8% de los consultados está «muy de acuerdo» o «de acuerdo» con una extensión del aislamiento preventivo social y obligatorio. Los datos surgen de un sondeo realizado por la consultora Proyección, sobre un universo de 1500 personas mayores de 16 años. El documento, al que accedió Tiempo, mide las percepciones sobre el impacto de la cuarentena y de la crisis económica. También indaga respecto a las opiniones vertidas sobre la intervención de la agroexportadora Vicentin y la relación con sus opiniones políticas.
El estudio fue realizado entre el 18 y el 20 de junio solamente en municipios bonaerenses. Sobre el nivel de acuerdo con una extensión de la cuarentena, un 31,3% de los consultados se mostró «muy de acuerdo», un 24,5% «de acuerdo», mientras que hay un 15,7% de indecisos. Del otro lado de las percepciones, un 12,5% contestó su desacuerdo, y un 16% contestó que está «muy en desacuerdo» con la prolongación de la cuarentena hasta «mediados de julio». Los indecisos alcanzan al 11,6% entre los votantes del FdT y al 20,3% entre aquellos que optaron por JxC.
Ante una posible prolongación, el 4,4% opina que la cuarentena se extenderá por menos de un mes, el 18,7% que durará «más de un mes», el 28,3% apuesta que el aislamiento durará dos meses adicionales, el 14,5% que sumará 90 días más y un 34,1% asegura que superará los tres meses.
La profundidad de las inquietudes entre los encuestados queda reflejada cuando fueron consultados sobre su preocupación ante un posible colapso del sistema de salud, si se mantiene el actual ritmo de contagios. Ante esa pregunta, el 51% contestó que le preocupa mucho y un 28,1% aseguró que «bastante».
Entre los temores sociales, el estudio también indagó sobre las probabilidades de contagio. El 14,5% cree que es «muy probable» contagiarse y un 41,7% lo considera «probable». Ambos grupos revelan que un 56,2% cree que puede contagiarse, mientras un 43,8 cree que no, en un abanico de opiniones donde un 36,6% lo considera poco probable y un sólo un 7,2% cree «nada probable» que se contagie.
Por otra parte, el 75,8% consideró que es necesario un «mayor control del uso de barbijos y distanciamiento», el 67,3 se inclinó por priorizar una mayor restricción del transporte público, el 61,9% priorizó la apertura de fábricas y un 48% reclamó un mayor control vehicular.
Entre los encuestados que votaron al Frente de Todos en las últimas elecciones presidenciales, el 46,2% está muy de acuerdo con la prolongación del aislamiento y un 27,1% está «de acuerdo». El escenario cambia drásticamente entre los votantes de Juntos por el Cambio. Dentro de ese universo, el 24,8% está «muy en desacuerdo» y el 24,4% no acuerda con la ampliación.
Marcha de la economía y estatización de Vicentin
En las consultas sobre la marcha de la economía, el 33,1% opina que es «muy negativa», el 19,7% que es «negativa» y el 14,7% considera que es «regular negativa». Las tres opiniones totalizan un 67,5% de posiciones negativas sobre la economía, mientras que un 15,5% reúne a las opiniones positivas. Entre ellas sólo el 0,7% considera que la marcha de la situación económica es «muy positiva».
En ese universo el 28,1% cree que su situación económica será «mucho peor dentro de un año», un 26,8% que será peor. Los dos continentes totalizan el 54,9% de pronósticos negativos, mientras que los positivos llegan al 28,7%, divido entre un 23,2% que espera que le vaya mejor el año que viene, y un 5,5% que considera que le irá «mucho mejor».
En ese contexto, cuando los encuestados son consultados sobre la expropiación de la agroexportadora Vicentin, las consideraciones están casi empatadas. Las opciones a favor llegan al 41,4%, repartidas en un 15% que considera que se debe expropiar para evitar su extranjerización, un 14,4% que la considera pertinente para garantizar los puestos de trabajo y un 12% la apoya, porque «la empresa estafó al Estado».
Del otro lado del mostrador, las posiciones contrarias llegan al 40,1%. El 17% contestó que «no se debe expropiar porque hay que respetar la propiedad privada», el 15,1% dijo que «no se debe expropiar porque es un abuso institucional» y un 8% rechazó la medida porque «genera desconfianza en el mercado». Entre ambos posicionamientos, hay una tercera porción de indecisos que llega al 18,5%.