Después de varios meses de dilatación, este martes Juan Schiaretti oficializó su precandidatura a presidente. En el marco de la presentación de obras de infraestructura en la localidad de San Francisco, el gobernador de Córdoba confirmó a la prensa el secreto a voces que circulaba desde mediados del año pasado. Este nuevo lanzamiento suma al del salteño Juan Manuel Urtubey, quien hizo lo propio hace dos meses.
Este espacio, que aún no tiene un nombre definitivo, buscará ser representante del «sector productivo del país» -especialmente en la región centro- y contará con una fuerte impronta federal. Además se propone como un espacio “antigrieta”, retomando el objetivo que tuvo la llamada “ancha avenida del medio” que se intentó construir en 2019. Según confirmaron a Tiempo, el lanzamiento oficial de la campaña llegaría a mediados de mayo y se llevará a cabo en Buenos Aires, en un lugar aún no definido.
Desde el entorno del cordobés, señalaron que el foco de esta campaña estará puesto en seducir a aquellos votantes que, además de sentirse agotados por las divisiones tajantes entre partidos, están desencantados con las gestiones tanto del Frente de Todos como de Juntos por el Cambio. Esto, sin embargo, sin descuidar la idea de pactar acuerdos en, al menos, diez puntos básicos que garanticen la buena funcionalidad del Ejecutivo y todo el aparato estatal que lo compone. Ante esto, desde el círculo del gobernador sostuvieron que aceptarían mantener una instancia de diálogo con Horacio Rodríguez Larreta, pero no así con Sergio Massa, una situación que podría explicarse por la supuesta “traición” del ahora ministro a la famosa tercera vía que se encaminaba a gestarse antes del lanzamiento del Frente de Todos, hace ya casi cuatro años.
Con la idea de tener un armado con intensa presencia en las provincias, en las que las demandas de las mismas sean escuchadas y, eventualmente, resueltas desde el conocimiento, el schiaretismo tiene el foco puesto en sumar la mayor cantidad de gobernadores y referentes del interior. Alberto Rodríguez Saa, gobernador de San Luis e histórico referente peronista de su provincia, fue el primero en concretar su pase -tal como se lo adelantó Urtubey a Tiempo– y será el atractivo que utilizará el partido para acercar a otros mandatarios que se vean perjudicados con la posible mala elección del oficialismo a nivel nacional.
El gobernador de Santa Fe, Omar Perotti, es uno de los nombres que más resuena como posible aliado de este sector. Si bien aún no hubo ningún acercamiento concreto, más que la relación estrecha entre sus provincias, uno de los armadores del cordobés confirmó a este diario que el acompañamiento del santafesino es casi un hecho. El anuncio, sin embargo, tardará un poco más en llegar hasta tanto el líder provincial pueda poner paños fríos la tensa situación del narcotráfico que azota día a día a Rosario. “Lo vamos a esperar”, afirmaron desde Córdoba.
Sergio Uñac, por su parte, también se encuentra en instancias de diálogo para sumarse a este espacio. El gobernador de San Juan, quien aspira a tener otro periodo en su cargo, está en dificultades porque la Corte Suprema está cerca de dejar firme el fallo provincial que le impide buscar un nuevo periodos.
Si bien el sanjuanino es calificado como uno de los gobernadores albertistas, la precandidatura de su antecesor, José Luis Gioja, quien cuenta con el apoyo de CFK, es otra de las dificultades que debe atravesar el gobernador, debido al apoyo que tiene el ahora diputado. Con estos hechos, el schiaretismo forma parte de las opciones que tiene Uñac para anclarse a un espacio peronista -no kirchnerista- y poder retener la mayor cantidad de votos posibles. Si bien las conversaciones con el cordobés se mantienen activas, las definiciones llegarían después del 14 de mayo, día en la que se celebrarán las PASO en San Luis.
A pesar de ver con cautela el avance de Javier Milei a nivel nacional, desde el círculo del cordobés ven con buenos ojos lo que sucedió en Mendoza y Neuquén, en donde creen que se podría gestar el gen del avance de la tercera vía. “(Omar) De Marchi se le plantó al cacique Alfredo Cornejo y este domingo sus candidatos hicieron una muy buena elección en las elecciones a intendentes. Lo mismo pasó con Rolando Figueroa, que rompió el MPN y triunfó. Esto quiere decir que en el interior el hartazgo de la grieta se nota y ese será nuestro foco”, afirmó a Tiempo un diputado cercano a Schiaretti.
Esta renovada tercera vía tiene, además, como aliados a los diputados Alejandro Rodríguez, Graciela Camaño y Florencio Randazzo y la senadora y esposa de Schiaretti, Alejandra Vigo, quienes estarán encargados de gestionar alianzas en sus respectivos sectores.
Con el lanzamiento oficializado del gobernador cordobés, esta nueva tercera vía se prepara para participar en las PASO con, al menos, tres candidatos. Además de Urtubey, la idea que predomina en el espacio es sumar a otra figura que represente el federalismo para así poder contar con más votos provinciales en una elección en donde el interior se encamina a tener cada vez más protagonismo.