Los integrantes de la Comisión Bicameral de Fiscalización de Organismos y Actividades de Inteligencia entregaron este jueves en el Consejo de la Magistratura el pedido de juicio político por mal desempeño en sus funciones a los camaristas Pablo Bertuzzi y Mariano Llorens. El presidente del Consejo, Diego Molea, se comprometió a darle un “pronto tratamiento” antes de que el organismo modifique su composición.
En calle Lavalle, en zona de tribunales, un grupo de diputados y senadores de la bicameral, que preside el diputado oficialista Leopoldo Moreau, fueron recibidos esta tarde por representantes del Consejo.
El duró unos 25 minutos. Del consejo participaron, además del académico Molea, los senadores del Frente de Todos Mariano Recalde y María Inés Pilatti Vergara; la diputada de Identidad Bonaerense Graciela Camaño; y el representante del Poder Ejecutivo Gerónimo Ustarroz.
Por la Comisión estuvieron los diputados del FdT Rodolfo Tailhade, Eduardo Valdez, Blanca Osuna, y los senadores del mismo espacio político Oscar Parrilli y Sergio Leavy.
En diálogo con Tiempo, Moreau explicó: “Tuvimos la oportunidad de exponer para darle contexto a la presentación que hicimos por escrito. Tanto la acusación como el pedido de juicio político giraron a la Comisión de disciplina y acusación que preside la chaqueña Pilatti Vergara”.
“El presidente del Consejo nos dijo que iban a intentar dar respuestas en la brevedad, por la importancia que tiene un pedido de una comisión parlamentaria, que es la primera vez que ocurre en la instancia del Consejo”, expresó el diputado.
Y resaltó que “la presentación fue muy sólida, con mucha prueba que deja en evidencia que estos jueces fueron cómplices del entramado del espionaje ilegal durante el gobierno de Mauricio Macri”.
El texto de 25 carillas indica que la sentencia dictada por estos jueces en la causa de espionaje ilegal que llevaba adelante el Juzgado Federal de Lomas de Zamora -que dispuso el procesamiento de 38 personas, entre ellas, las máximas autoridades de la conducción de la AFI en el periodo presidencial de Mauricio Macri- fue fulminada por una “resolución irrita y arbitraria”, cuyo objeto principal fue asegurar la impunidad de quienes encabezaron “el sistema de espionaje ilegal”.
La Cámara Federal porteña, con los votos de Llorens y Bertuzzi, desligó al entonces titular de la AFI, Gustavo Arribas, y a su mano derecha, Silvia Majdalani, señalando que los agentes que realizaron espionaje ilegal del denominado grupo «Súper Mario Bross» actuaban por su cuenta.
El escrito, al que pudo acceder Tiempo, adjunta el informe sobre espionaje ilegal en el período 2016-1019 que hizo la Bicameral. Allí se analizó el funcionamiento del organismo de inteligencia estatal llegando a la conclusión de que por entonces “se llevó adelante un plan sistemático ideado en lo más alto del Gobierno Nacional, que consistió en la violación de elementales derechos humanos y la persecución de ciudadanos argentinos por el sólo hecho de su pertenencia política”.
Respecto a Bertucci y Llorens señala que “ambos jueces se interesaron en mantener una intervención que la legalidad les impedía, eludiendo los reclamos de las víctimas y procurando garantizar la impunidad de aquellos integrantes de la Mesa Judicial a los que se vincula”. Tras la presentación del pedido, Moreau se mostró optimista frente al tratamiento del tema. “Confió que va a avanzar. Se puso en marcha el mecanismo que está previsto dentro de las normas del consejo. Pedimos volver a participar para exponer en la instancia de audiencias”, agregó.