A nueve días de las PASO, Juan Schiaretti prepara el sprint final de una campaña impregnada de federalismo. Esquivando los rumores de una posible renuncia a su candidatura, el todavía gobernador de Córdoba y precandidato a presidente concentrará sus actividades en la búsqueda del «voto anti grieta y productivo».
La última curva inició este martes, en Quilmes. El cordobés aterrizó por primera vez en tierras bonaerenses bajo el ala de la ex senadora Hilda “Chiche” Duhalde, quien juntó a su tropa en el club Social y Deportivo Unión de Ezpeleta para darle la bienvenida a su candidato. Haciendo uso del capital político que dejó el duhaldismo, la esposa del ex presidente está a cargo, junto a los diputados Florencio Randazzo y Alejandro “Topo” Rodríguez, de configurar el escenario de Schiaretti en el bastión electoral más grande del país, y donde no cuentan con candidato a gobernador.
Tras un breve paso por Buenos Aires, el gobernador regresó a Córdoba para continuar con las recorridas en el interior de la provincia, hogar del sector productivo y ganadero al que quiere volver a conquistar, esta vez como candidato presidencial. Para tratar de pelear el voto a Juntos por el Cambio, Schiaretti utiliza el antikirchnerismo de su provincia a su favor, pero sin dejar de lado su discurso anti grieta, expresión bien recibida en el centro del país.
Los días que separan de la elección, todo el schiarettismo saldrá a la cancha para intentar enamorar a los indecisos. Con la estrategia de aprovechar el desgaste de la interna opositora y la gestión oficialista, Hacemos por nuestro País (HPNP) desplegará recorridas en las dieciséis jurisdicciones donde cuenta con candidato propio.
Este viernes, el gobernador visitará Mendoza y San Juan. La agenda en ambas provincias se centrará en reuniones con empresarios y productores. La apuesta es llevar sus propuestas de desarrollo y producción específicas para cada sector. En cada recorrida estará acompañado por quienes encabezan las listas de diputados y senadores nacionales, encargados del armado en cada bastión. El mismo operativo se replicará el próximo lunes en La Rioja y Catamarca.
En sintonía, esta semana su compañero de fórmula, Florencio Randazzo, recorrió Salta, Corrientes y Misiones. Junto a la senadora y esposa del gobernador, Alejandra Vigo, Randazzo esparció su deseo de superar las divisiones para trabajar en un país con un estado “inteligente y austero» en cada recorrida. Lo propio harán los diputados Rodríguez y Carlos Gutierrez -en Buenos Aires y Córdoba, respectivamente- y el precandidato Diego Bossio en CABA para lograr ampliar aún más la base de votantes del peronismo no kirchnerista.
La próxima semana, Schiaretti visitará localidades de Córdoba y el miércoles volverá a viajar a Buenos Aires en un último avistaje antes de las Primarias. El jueves dará una entrevista exclusiva al canal de televisión más importante de su provincia y, tras su salida, se dirigirá a su cierre de campaña. El acto está previsto para las 19:30 en el Quality Arenas, uno de los espacios más importantes del interior del país. Del mismo participarán referentes provinciales, incluidos el gobernador electo, Martín Llaryora, y nacionales del espacio.
Desde el círculo del gobernador anticipan una buena elección, en especial en su provincia natal. Sin descuidar los últimos datos en donde la baja de participación electoral es notable, auguran que el rechazo general que causaron las internas de JxC y el descontento por Unión por la Patria puede ser capitalizado por Schiaretti y su propuesta de la ancha avenida del centro. “La hincharon tanto a la gente que hasta capaz que nos va mejor de lo que esperábamos”, sintetizaron desde Córdoba.