El Partido Justicialista de la Provincia de Buenos Aires afirmó que los ataques ocurridos durante este jueves contra la Municipalidad de Lomas de Zamora implican un «falso conflicto teñido de oportunismo electoral», y sostuvo que se trató de «resabios de la vieja metodología funcional a los enemigos del pueblo». «El ataque perpetrado por un grupo minúsculo de violentos, de ningún modo constituye un reclamo justo ni una petición constitucional a las autoridades públicas. Son resabios de la vieja metodología funcional a los enemigos del pueblo que aprovechan estos hechos para desacreditar una gestión de gobierno en épocas electorales», sostuvo el PJ bonaerense a través de un comunicado en el que se hace referencia a los incidentes de ayer en el edificio municipal de ese distrito.
Durante la tarde del jueves un grupo de unas 80 a 100 personas intentó ingresar a la sede de la Municipalidad de Lomas de Zamora por el sector de acceso que corresponde al personal. Según relató el intendente Martín Insaurralde, «los empleados comenzaron a forcejear pero algunos de ellos”, que “ingresaron, rompieron vidrios y molinetes y llegaron hasta la primera parte del hall central». El intendente planteó que cuando «llegó la policía, los violentos comenzaron a prender fuego» en el edificio, y que «la situación nada tuvo que ver con la práctica democrática de pedidos» ni con una «protesta social».
Por su parte, el bloque de senadores de Juntos -la nueva denominación electoral de la alianza del PRO, la Coalición Cívica y la UCR en la provincia de Buenos Aires- también repudió durante este viernes los hechos de violencia y el intento de toma de la sede municipal de Lomas de Zamora ocurridos ayer, e instó «a la pronta resolución del conflicto mediante los caminos del diálogo». «La violencia nunca debe ser el camino y todos quienes abrazamos la democracia debemos ser categóricos en nuestro repudio frente a un hecho de atropello a las instituciones», afirmaron los legisladores de la oposición, también a través de un comunicado.
En ese marco, los legisladores expresaron su solidaridad «con los trabajadores y trabajadoras que fueron víctimas de un acto de violencia e instamos a las partes a buscar acuerdos en el marco del respeto». Además, indicaron que «no es la primera vez que un municipio bonaerense recibe un ataque de esta naturaleza» y agregaron: «En esta ocasión, como en las anteriores, no vamos a naturalizar los actos de violencia ni a mirar para otro lado porque entendemos que esta debe ser la actitud que debemos adoptar todos quienes deseamos salvaguardar la vida democrática».
Por su parte, desde el PJ bonaerense consideraron que los hechos de en cuestión «pretenden generar un falso conflicto, oportunista y electoral, que no se inscribe en la realidad cotidiana de los sectores vulnerables, a los cuales asistimos permanentemente, sino que manifiestan una forma de hacer política reñida con los valores de la democracia que son la sana convivencia, la resolución de los conflictos en forma pacífica, la superación de las injusticias con trabajo y justicia social». «La misión del Estado, para preservar estos valores, es irrenunciable. En consecuencia, vamos a profundizar el camino de la esperanza de la mano del Pueblo, que es lo mejor que tenemos», concluye el texto y se solidarizan con Insaurralde quien «ha demostrado desde siempre su preocupación por quienes más sufren».