Los ex presidentes brasileños Luiz Inácio Lula da Silva y Dilma Rouseff, junto al ex mandatario de Ecuador, Rafael Correa, criticaron el pedido de desafuero y de encarcelamiento de la ex presidenta Cristina Fernández. Lula calificó de «preocupante la cacería judicial y mediática» y Correa dijo que el verdadero delito es haber dado justicia y dignidad, luego de que se conociera el procesamiento del juez federal Claudio Bonadio, quien dictó su detención en la causa por el acuerdo de la Argentina con Irán por el caso AMIA.
«Expreso mi solidaridad a la presidenta Cristina Kirchner y a sus colaboradores que tanto hicieron por el pueblo argentino y por la integración sudamericana», dijo Lula en su cuenta de Twitter.
El líder del Partido de los Trabajadores escribió: «Es preocupante la verdadera cacería judicial y mediática lanzada contra esta compañera a quien tanto admiro y estimo».
Causa espanto el modo autoritario con que el presidente Mauricio Macri y su grupo lidian con la oposición política, el Ministerio Público, la prensa y los movimientos sociales y sindicales, dice una nota divulgada este viernes por los diputados del partido liderado por los ex mandatarios Luiz Inácio Lula da Silva y Dilma Rousseff.
Los diputados del PT se solidarizan con Cristina, sobre quien dicen que es claramente perseguida por el juez Claudio Bonadio, quien hoy procesó a la ex mandataria por un presunto encubrimiento de los iraníes acusados del atentado a la entidad judía AMIA de Buenos Aires en 1994, que causó 85 muertos.
Lula, que gobernó Brasil entre 2003 y 2010, es el candidato presidencial favorito en las encuestas para las elecciones de octubre.
Pero sus aspiraciones pueden truncarse en caso de que antes de la inscripción electoral, un tribunal de segunda instancia confirme la condena a 9 años y 4 meses de prisión por corrupción dictada por el juez Sérgio Moro en la Operación Lava Jato.
La reacción de Lula frente la decisión del juez Bonadio se produjo luego de que el jefe del bloque de diputados del PT, Carlos Zarattini, envió un comunicado denunciando «lawfare» contra la ex presidenta Fernández de Kirchner, el mismo término que usan para referirse al caso del líder del PT.
El lawfare, según Zarattini, es la utilización de las herramientas jurídicas del Estado puestas a disposición de un objetivo político.
«Lo que se ve en curso en Argentina es la misma estrategia usada por la derecha en otros países de América Latina: se valen del lawfare y de los cañones mediáticos para asesinar reputaciones frente a la disputa presidencial de 2019», dijo Zarattini en un comunicado divulgado a la prensa extranjera.
Lula se encuentra en Nova Iguaçú, en el Gran Rio de Janeiro, como parte de su tercera caravana por el país de cara a su candidatura presidencial.
Po su parte, el ex presidente ecuatoriano Rafael Correa identificó el procesamiento con prisión preventiva dictado a la senadora con una judicialización de la política en todo el continente. La judicialización de la política. El mismo libreto en todos lados: Dilma (Rousseff), Lula (Da Silva), (el vicepresidente ecuatoriano Jorge Glas, Cristina, dijo Correa. A través de una red social y al comentar la decisión del juez federal Claudio Bonadio, señaló que los traidores no pierden la esperanza de que pronto sea yo.