Este 27 de octubre se celebran elecciones generales en Argentina. Además de presidente y vice, se renueva la mitad de la Cámara de Diputadxs, es decir 130 diputadxs nacionales (de 257 que hay en total) cuyo mandato durará cuatro años. También un tercio de la Cámara de Senadorxs, es decir 24 bancas (de las 72 en total que integran el Senado) para los próximos seis años.
Luego de las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (Paso) 2019, Agencia Presentes realizó un relevamiento de candidatxs del colectivo LGBTI+ en todo el país que competirán para distintos cargos en las elecciones generales. Surgió una nómina de 19 candidaturas de personas LGBTI+ visibles (puede haber más que no aparezcan en registros mediáticos como parte del colectivo). Menos la mitad tiene muy pocas posibilidades reales de acceder al puesto para el cual se candidatea, dada la ubicación final en la boleta.
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Este dato puede relacionarse con otro que surge de analizar la lista de candidatxs LGBTI+ registrada por Presentes en la previa a las Paso 2017. Ese registro sumó 32 nombres de precandidates, de los cuales sólo tres vuelven a aparecer en las boletas actuales. Les otres no accedieron a ningún cargo en ese entonces ni volvieron a presentarse este año, a pesar de que en sus redes sociales demuestran una activa militancia en barrios y organizaciones sociales.
¿Candidaturas simbólicas?
Entonces ¿cuál es el compromiso o la intención real de los frentes partidarios al construir políticamente espacios con personas LGBTI+ cuando los datos previos indican que las candidaturas en la mayoría de los casos son simbólicas? Porque las chances concretas de ocupar un lugar de poder se ven reducidas al ubicar esos nombres al final de las boletas, o bajo el subtítulo de suplentes.
A pesar de que Argentina tiene leyes como matrimonio igualitario e identidad de género, y uno de los movimientos de diversidad sexual más potentes de la región: “¿por qué no figuran esos cuadros entre los primeros lugares en el cierre de listas?, se preguntaba hace dos años la periodista y poeta Gabriela Borrelli Azara. “¿Por qué el más vivo de los movimientos políticos junto al feminismo ( porque se contienen mutuamente) no lleva más gays, lesbianas y trans a las listas de los principales partidos políticos?”.
“Hemos conquistado un espacio”
María Pía Ceballos, directora del Observatorio de Violencia contra las mujeres en Salta y activista de Mujeres Trans Argentina, fue candidata a diputada provincial (Seamos Libres) en las elecciones que se realizaron en Salta el 6 de octubre. No resultó electa, pero lee su candidatura y la de otrxs en clave de un avance significativo. “Aunque les candidates LGBT+ todavía seamos una minoría dentro de los armados políticos, hemos conquistado un espacio del que no nos harán retroceder. Esta primera experiencia electoral fue profundamente enriquecedora y positiva” -dijo a Presentes-. “Quizás el prejuicio a algunes les haga pensar que en la Salta conservadora una candidate del colectivo LGBT+ no sería bien recibida: no fue así. Hubo momentos de zozobra, pero la calidez que recibimos de les vecines es claramente más fuerte”.
Para Ceballos, en esta “lucha simbólica es preciso marcar antecedentes para que otras personas trans se animen a ocupar espacios públicos de decisión y transformar miradas más normalizadas en pos de un futuro amigable con la diversidad y le otre diferente. Este es solo el puntapié inicial y vamos a seguir en la.lucha por la Salta diversa e inclusiva que soñamos”.
“La soledad y la clandestinidad ya no serán nuestra casa”
Keili González, activista trans de Nogoyá, fue candidata en las PASO para diputada provincial de Entre Ríos por el Movimientos Socialista de Les Trabajadores (MST). “Fue un gran desafío y arrojó resultados: entre 7 listas nos posicionamos como tercera fuerza provincial. Me llevó a postularme el entender que la historia también debe ser de las travas y las trans. Para eso, debía politizar mi vida en todos los aspectos posibles, hacer de ella una acción colectiva. Reconvertir el malestar, la angustia y el sufrimiento en fuerza transformadora”, dijo Keili a Presentes. Y agregó: “El colectivo travesti y trans ya no tiene que por qué soportar que nos roben la vida para que con esas piezas construyan la mecánica del capital y de la explotación en beneficio de unos pocos y en detrimento de las mayorías. Debemos ser parte de esas decisiones que allanen la vida de les oprimides”.
Está agradecida “a cada entrerriane que apostó a mi voz y a cada cuerpa que puso en su boca mi nombre”. Y hace un balance: “La lucha para estar en la Cámara Baja la dí asumiendo una forma contrahegemónica de compromiso como cambio de paradigma en los modos conservadores de concebir la política. Lo que arrojaron esas elecciones no solo es que la soledad y la clandestinidad ya no serán nuestra casa, sino poder darnos cuenta de que somos muches quienes queremos cambiar la realidad económica, política, social y ambiental para lxs trabajadores, la juventud, las mujeres, las lesbianas, travestis y trans, les excluides”.
El contexto latinoamericano
Se calcula que más de 70 personas LGBTI ocupaban cargos electos y de gobierno en América Latina en 2017, según estimaron en el III Encuentro de Liderazgos Políticos LGBTI para América Latina y el Caribe. “Hoy el número de personas abiertamente lesbianas, gays, bisexuales, transexuales e intersex en cargos está creciendo vertiginosamente”- dijeron entonces lxs organizadorxs-. “Hace cinco años, se podían contar con los dedos. Estos liderazgos están en la primera línea en la lucha por la igualdad”.
En 2018 Brasil celebró elecciones con un avance descomunal de la derecha pero también con un récord de candidaturas de personas travestis y trans. Fue el mismo año en que asesinaron a Marielle Franco, la concejala lesbiana, feminista y afro. Marielle a su vez fue impulsora de la candidatura de Indianaire Siqueira, activista trans brasilera, que en 2017 ganó un lugar como candidata a concejala suplente de Rio de Janeiro.
A pesar del machismo y el racismo que Indianaire denuncia en la política, el posteo que escribió sobre su triunfo -y sobre su historia de vida- se hizo viral en Brasil, el país más peligroso del mundo para las personas trans. “Mi suplencia como concejala trans de Rio es una victoria de los cuerpos de trans y travestis que cayeron por mí. Que sobrevivieron por mí. Que cayeron a mi lado. Por los cuerpos que pueden decir: sí podemos, ellas y ellos pudieron. Soy resistencia. Soy resiliencia. Porque en mí viven. Estaremos en todos los espacios públicos que se nos han negado”.
* Investigación periodística: Soledad Mizerniuk y Victoria Rodríguez.
* Programación: Enjambre Bit