Cambiemos entregó casi todo y no le sobró nada. Poco después de las 11:30 el oficialismo logró sentar 129 diputados – lo justo y necesario- para habilitar la sesión y comenzar a debatir el proyecto de Presupuesto 2019.
Cambiemos contó con el apoyo del peronismo de los gobernadores para conseguir el quórum. El bloque Argentina Federal, que conduce Pablo Kosiner, sólo aportó un tercio de sus 33 diputados. Las provincias que sentaron a por lo menos uno de sus representantes fueron San Luis, San Juan, Tucumán, Misiones, Córdoba, Salta y Mendoza. El número necesario se completó con el aporte del bloque Evolución que conduce Martín Lousteau.
En ese marco, las sorpresas en el inicio de la sesión fueron dos: la ausencia de los santiagueños y la presencia de los legisladores del peronismo puntano.
Una vez alcanzado el quórum el sector destinado a la oposición se pobló rápidamente.
El proyecto de Presupuesto que impulsa el oficialismo contempla un duro ajuste como parte del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Sindicatos, organizaciones sociales y políticas se movilizan a las puertas del palacio legislativo en rechazo del proyecto.
La zona del Congreso se encuentra vallada y fuertemente custodiada por fuerzas de seguridad de la Ciudad y federales, lo que marcará uno de los puntos de tensión de la jornada.
Si bien la mayoría se movilizará durante la mañana, el Movimiento Evita, la Confederación de Trabajadores e la Economía Popular (CTEP), la Corriente Clasista Combativa y el Frente Popular Darío Santillán, entre otras, comenzaron el martes con acampes y ollas populares como parte de una vigilia para esperar el tratamiento.
Cerca del lugar del acampe, el canal C5N mostró la presencia de bolsas con escombros y piedras que los dirigentes sociales vinculó a una operación del gobierno para enturbiar el clima social. «Llama la atención la cantidad de cascotes que aparecieron en la zona de Congreso. Ninguno de los manifestantes los pusimos allí, ni siquiera hay una obra en construcción”, dijo Daniel Menéndez, de Barrios de Pie, a Crónica Anunciada, y agregó dio «casi como un hecho que los servicios infiltrados van a provocar incidentes».
Los docentes son unos de los primeros en arrancar con las protestas. En el marco de un paro nacional, los gremios de los maestros UTE y Ctera marchan desde las 9 al Ministerio de Educación, ubicado en el palacio Pizzurno, y desde allí irán al Congreso.
Los bancarios, que debieron levantar el paro por una conciliación obligatoria concedida por la Secretaría de Trabajo, se movilizarán al Congreso desde el microcentro a partir de las 11.
En el transcurso del día se sumarán las marchas anunciadas por el Frente de Izquierda, Barrios de Pie, La Cámpora, el Polo Obrero, ATE, la CGT, CTA, CTEP y la CCC, entre otras.