El mandatario brindó una conferencia desde la ciudad de San Bernardo luego de reunirse de manera presencial con los jefes comunales de los distritos turísticos -y por videoconferencia con el resto de los municipios- para evaluar la situación epidemiológica y el crecimiento de contagios tras las fiestas de fin de año, y en el arranque fuerte de la temporada de verano. Lo hizo acompañado por el jefe de Gabinete, Carlos Bianco; el ministro de Salud, Daniel Gollan; el ministro de la Producción, Augusto Costa; el ministro de Seguridad, Sergio Berni, y el intendente del partido de La Costa, Cristian Cardozo.
«Hay que cambiar el chip porque hay mucho riesgo», dijo Kicillof y llamó a los bonaerenses a reforzar los cuidados. «Como nuestro objetivo es sostener todo lo que podamos la actividad, el trabajo y el turismo, lo que hemos determinado es poner muchísimo más enfasis en los cuidados y en el cumplimiento de los protocolos», dijo.
Puntualizó que, en el pico de la pandemia, a fines de agosto, la provincia llegó a tener 6 mil casos diarios, luego bajó de manera sostenida hasta llegar a mil casos a comienzos de diciembre, y que en las últimas tres semanas, el promedio subió nuevamente hasta los tres mil casos. «Es decir que se ha visto un crecimiento muy preocupante en toda la provincia», evaluó.
En este punto, Kicillof consideró que «hoy no estamos en una situación de emergencia pero no queremos que se contagie todo el mundo» y, en este marco, llamó a «fortalecer los controles, incentivar y pedir a la población que vuelva a cuidarse como lo hacía en los peores momentos porque puede llegar a una situacion crítica».
«De momento llamamos a un cumplimiento más estricto en defensa propia de cada una de las decisiones y de los protocolos ya establecidos. Tenemos que cuidarnos todos y todas y entre todos y todas. Esto lo estamos volviendo a repetir porque el crecimiento de los contagios enciende una luz de alerta», remarcó.
El gobernador habló de la necesidad de «reducir los contactos y la movilidad» de manera de frenar los contagios, aunque dijo que por ahora no dispondrán
un «toque de queda» sanitario en la Costa para la actividad nocturna, tal como se especulaba. No descartó, no obstante, que se tomen medidas de ese estilo la próxima semana en conjunto con la Nación y el gobierno porteño. La idea sería tomar restricciones «lo más focalizado posible», según anticipó.
Kicillof explicó que analizarán la curva de contagios de la semana en curso, para ver cuál fue el impacto de las reuniones por las fiestas de fin de año y definir nuevas medidas en el marco del distanciamiento social que rige desde noviembre en la provincia y el país. «La terminación de esta semana completa nos va a permitir conocer cuál es el estado exacto del nivel de contagio, la localización y las características», afirmó y adelantó que se reunirán con autoridades nacionales y de la Ciudad antes de definir cualquier nueva medida en el marco de la cuarentena.
El mandatario aseguró que aún no hay indicios de la nueva cepa de coronavirus en la provincia y mostró sus expectativas con la vacunación que el viernes llegará a los 135 distritos de la provincia. «Hoy no hay indicios de que tengamos acá la llegada de la nueva cepa. Estamos haciendo un seguimiento, por ahora no. Pero esto depende de los contagios», aclaró.
Respecto del plan de vacunación, Kicillof sostuvo que esta semana llegarán a los 135 municipios y precisó que ya son 550 mil los bonaerenses que se inscribieron, «de todos los rangos etarios y las ocupaciones», para vacunarse en la web https://vacunatepba.gba.gob.ar… También adelantó que, a fines de enero o comienzos de febrero, esperan «superar el millón y medio de vacunas».
Los índices que preocupan
El ministro Daniel Gollan explicó durante la conferencia cuáles son los indicadores que preocupan al gobierno bonaerense. Habló de la suba de los contagios y de los llamados al 148, pero precisó que se duplicó la «positividad» en los test de PCR.
El titular de Salud explicó que el pico de casos de COVID 19 en la provincia se dio entre el 24 y el 30 de agosto con 5.845 contagios diarios. Los contagios bajaron de manera escalonada hasta llegar a 1365 en la semana del 7 al 13 de diciembre. Sin embargo, tras las Fiestas de fin de año se registró una subida abrupta y entre el 28 de diciembre y el 3 de enero fueron 3.199 los casos por día. «Es preocupante la suba de casos», dijo.
Más allá de curva, Gollan mostró alarma por otros dos indicadores. El primero es la línea 148. «Veníamos con un descenso muy fuerte de las llamadas hasta el 8 de diciembre. Desde el 25 de diciembre tenemos un ascenso prácticamente en vertical, suben en forma alarmante y eso es un mal indicador porque hay dos semanas antes de que se confirmen los casos», apuntó.
El segundo índice es el nivel de «positividad» en los test realizados. «De cada 10 personas con examen de PCR teníamos 2 positivos, y ahora ese número se ha duplicado. Pasó al 40%», puntualizó.
Gollan acotó que también siguen de cerca la cantidad de camas ocupadas de terapia intensiva, intermedias y generales del sistema de salud. «Todavía estamos bien ahí, decimos todavía bien porque recuerden que duplicamos la cantidad de camas de UTI. Llegamos a tener 1200 internados con COVID en UTI por agosto o septiembre y ahora tenemos 500», dijo y agregó: «Lentamente comienza a crecer la cantidad de camas ocupadas. En corto tiempo podríamos tener en franca tensión el sistema sanitario».
Por su parte, el jefe de Gabinete, Carlos Bianco, recordó que el sistema de fases sigue vigente en la provincia y que, si hay brotes, los municipios deben retroceder de fase como ocurrió a lo largo de 2020. En este sentido, informó que esta semana 15 municipios retrocedieron a la fase anterior por la suba de casos y detalló que hay 109 distritos en fase 4, 17 municipios en fase 5 y 9 municipios en fase 3.
«El sistema de cambio de fases es intermitente y permite que, cuando vemos algún brote o contagio masivo, podemos dar un paso hacia atrás, es la virtud que tiene el sistema de fases», explicó Bianco.
«Los distritos en fase 3, durante una semana y hasta analizar la situación epidemiológica, van a dar un pasito atrás para controlar los focos de contagio», afirmó y detalló que en esa fase no se podrán realizar, por ejemplo, actividades sociales en espacios cerrados, eventos de hasta 100 personas tampoco, ni estarán permitidos los shoppings, centros comerciales, colonias de vacaciones y jardines maternales.