El candidato a vicepresidente de Juntos por el Cambio, Miguel Ángel Pichetto, parece decidido a colocarse cada vez que puede más y más a la derecha con sus declaraciones públicas. Este sábado se dedicó a criticar las movilizaciones de las organizaciones populares para que se declare la emergencia alimentaria y a la Iglesia por no criticar la protesta en los shoppings: “Me inquieta el silencio de la Iglesia, que no haga una reflexión de la violencia en las calles y shoppings”, declaró en una radio.
Para el senador rionegrino, el trabajo de los movimientos sociales en los sectores populares, que prácticamente están reemplazando el rol del Estado, no merece una mención, por el contrario, decide apuntar contra ellos porque “se creen que son dueños de la acción, que pueden ocupar las calles y que la pobreza les da legitimación para hacer cualquier cosa”. Según expresó el mensaje de las organizaciones que acamparon en el obelisco «es para Macri y para el gobierno que viene».
Además volvió a avanzar en el negacionismo de la pobreza: “Decir que la gente no come en Argentina, es una exageración”. Aseveraciones que suceden pocos días después de que Diputados blanqueara la situación al aprobar por unanimidad la ley de emergencia alimentaria (falta que pase por Senadores) que aumentó en un 50% los recursos destinados a este fin, por un monto de 10 mil millones de pesos.
En esa línea sostuvo que “hay que reestructurar” los planes sociales para “alivianar la carga impositiva a la clase media trabajadora y las pymes”, y cuestionó a los referentes sociales por ser “gerentes de la pobreza» que reciben “muchos recursos del gobierno nacional”
El peronista-Pro advirtió que “los planes no pueden ser para siempre. Es un gasto que Argentina no se puede sostener”, soslayando que el gobierno del que ahora es candidato ha duplicado la cantidad de planes respecto del gobierno anterior debido a la suba del desempleo. En ese tono, cuestionó a los “gerentes de la pobreza”, dijo que «hay planeros o piqueteros que tienen un trabajo en negro y cobran el plan».
Con un discurso destinado a su núcleo duro de votantes, reiteró con ironía que «ahora resulta que además de emergencia social, está la emergencia alimentaria, como que la gente no come en la Argentina, me parece que son exageraciones», reflexionó el senador, y se refirió a los venezolanos que llegaron en los últimos tiempos al país, y “están todos trabajando en estructura de servicios, como hoteles, gimnasios, restaurantes”.