El interbloque de Juntos por el Cambio analiza por estas horas la redacción de la denuncia que presentará en los próximos días. Es para solicitar la nulidad de la sesión que se desarrolló el martes pasado en la Cámara de Diputados.  

Ese día, el Frente de Todos volvió a renovar el protocolo de trabajo remoto para funcionar de manera mixta y convertir en ley el proyecto de incentivo para el sector turístico y aprobar la iniciativa que endurece las multas a la de pesca ilegal. Se hizo sin el consentimiento de los legisladores del espacio que conduce Mario Negri. El protocolo fue un apartado del reglamento aprobado por las tres cuartas partes de la Cámara en el inicio de la pandemia estableció que “estará vigente mientras dure el aislamiento social, preventivo y obligatorio en todo el territorio nacional, y por periodos de 30 días prorrogables, que serán refrendados por el consenso de la Comisión de Labor Parlamentaria”. Aunque hubo consenso mayoritario en esa Comisión, los cambiemitas consideran que la sesión “mixta” sin su apoyo fue “irregular”. Y que la justicia será la que en última instancia deberá intervenir sobre su validez. 

Según pudo saber Tiempo, la letra chica del texto está en manos de los diputados Pablo Tonelli (PRO), Gustavo Menna (UCR) y Mariana Stilman (CC). La presentación podría “realizarse el día lunes en la ciudad de Buenos Aires, en el fuero contencioso administrativo”. 

Los legisladores opositores movilizaron 94 diputados de todo el país al Congreso el martes pasado. Y también habían llevado un escribano público para “constatar quienes se encontraban de manera presencial en el recinto para dar el quórum en la sesión especial convocada por el oficialismo, según los artículos del reglamento interno de la Cámara Baja, que establecen la presencialidad en una sesión en un contexto no extraordinario como el que atraviesa el país por estos momentos”.   

“Paradójicamente quienes estábamos en el recinto presente no fuimos computados ni en la pantalla ni en el monitor que muestra el quórum reglamentario. Y sí se estaba contabilizando a los legisladores que estaban conectados por el sistema virtual”, señaló un radical de la provincia de Mendoza a este medio.  

Los diputados de Cambiemos argumentan que quieren “evitar” tratar proyectos como la reforma judicial y el impuesto a las grandes fortunas. Consideran que “requieren de un debate profundo sin limitaciones en los tiempos de conexión remota”. 

Lo cierto es que por el momento Juntos por el Cambio no hizo ninguna presentación judicial, como había  anunciado el martes en las largas expresiones que se dieron en el recinto.  

En el oficialismo parlamentario consideran que “parece que están esperando una nueva convocatoria de negociación más que avanzar la presentación”. 

Aún no puede confirmarse si avanzarán o desistirán impugnar una sesión donde el resto de los bloques convirtieron en ley una asistencia al sector turístico, tan golpeado en estos meses de pandemia.   

El día después de la sesión, Massa junto al jefe de la bancada del FDT, Máximo Kirchner, mantuvieron una reunión en Olivos con el presidente Alberto Fernández. Si bien fuentes del oficialismo comentaron a Tiempo que era un encuentro ya programado donde se trataron temas legislativos y las amenazas que sufrió Massa y su familia, no se descarta que en el mitin se haya analizado un acuerdo con los opositores para renovar el trabajo parlamentario sesión por sesión o avanzar en la idea de hacer sesiones presenciales para los temas polémicos en un lugar más amplio que el recinto con mayoría presente y diputados con riesgo de salud conectados de manera remota.

Las amenazas al tigrense fueron repudiadas por dirigentes propios y ajenos e incluso en su cuenta de Twitter, Alberto Fernández expresó: «Las amenazas de muerte contra Sergio Massa y Malena Massa son inaceptables desde cualquier punto de vista e impropias de la convivencia democrática. Convoco a quienes agitan discursos de odio a reflexionar, porque sus acciones repercuten en forma negativa en toda la sociedad».