El jefe de Gabinete de Ministros, Marcos Peña, rechazó la aplicación de la Ley del 2X1 en las condenas de delitos de lesa humanidad al evaluar que esa norma constituye un «símbolo de impunidad», luego de que la Corte Suprema de Justicia aplicara este martes ese cálculo en favor del represor Luis Muiña.
«Rechazamos el 2×1, y rechazamos más que se aplique a los delitos de lesa humanidad. Esperamos que sea muy restrictiva» su utilización, sostuvo el funcionario en declaraciones a Radio Nacional, desde la provincia de Mendoza donde hace un seguimiento de las obras que están en ejecución.
Peña explicó que «consideramos que el 2×1 es un símbolo de impunidad en general porque es un mecanismo que beneficia, o beneficiaba, a los delincuentes más complicados, más duros. Esto se agrava muchísimo con lo que tiene que ver con lesa humanidad».
No obstante, remarcó que «la Corte Suprema (de Justicia) es independiente y ellos (el tribunal que la integra) son los que tienen que velar por la responsabilidad de sus fallos». «La política del Gobierno es continuar con las acciones de Memoria, Verdad y Justicia y la búsqueda del fin de la impunidad», expresó Peña.
En este sentido se refirió a los «documentos desclasificados» de la dictadura militar que se pueden consultar gracias las acciones del «gobierno nacional que vino trabajando para que esto sea posible».
Las declaraciones de Peña están en sintonía con las expresadas por el ministro de Justicia, Germán Garavano, quien apenas se conoció el fallo salió a manifestar su oposición respecto de la ley del 2×1 sin dejar de remarcar la «independencia del Poder Judicial» por la que también pugnan las autoridades nacionales.
Por su parte, Hernán Lombardi dijo «al fallo lo tenemos que acatar y respetar», durante una entrevista en el programa El Lobby de Radio con vos. También dijo que le escandaliza «cualquier decisión que lleve a la impunidad».
A su vez, criticó el último acto del 24 de marzo por el Día de la Memoria, la Verdad y la Justicia deslizando que desde el palco oficial »se reivindicó a las organizaciones armadas». Ante algunos planteos por parte del equipo periodístico del programa al respecto, Lombardi retrocedió y tuvo que destacar el comportamiento de los organismos de Derechos Humanos. «El terrorismo de Estado no es equiparable a la violencia política previa, el gran mérito de las organizaciones de Derechos Humanos es que no volvió la violencia política a la argentina, no hubo un intento de venganza».
El titular de Sistema Federal de Medios y Contenidos Públicos hizo referencia al pedido de reconciliación por parte de la Iglesia. «A mí me parece que es insensato y que esas reconciliaciones no tienen ningún destino. No sólo no clarifica sino que puede llevar las cosas hacia otro lugar», opinó Lombardi.